Es algo que todos hemos experimentado: esa inevitable caída de energía después del almuerzo que nos hace luchar por mantener los ojos abiertos y la concentración en el trabajo. La Sleep Foundation confirma que este fenómeno es parte de nuestro ritmo circadiano natural. Sin embargo, cuando lo combinamos con una comida copiosa, el efecto puede ser aún más pronunciado. Si te encuentras a menudo en esta situación, no estás solo. Afortunadamente, el Dr. Christopher Rhodes, biólogo nutricional y director ejecutivo de Mimio Health en Davis, tiene algunas estrategias efectivas para contrarrestar este bajón energético.
Cómo evitar el bajón de energía del mediodía
¡Espero que estos consejos te sean útiles y te ayuden a mantener tu energía en niveles óptimos a lo largo del día!
Mantén la glucosa controlada
La glucosa es la principal fuente de energía de nuestro cuerpo, y mantener sus niveles equilibrados a lo largo del día es crucial para evitar esos bajones de energía. Para lograrlo, combina los carbohidratos con grasas saludables, proteínas y fibra. “La clave para una energía sostenida es tener los niveles de glucosa equilibrados en rangos normales durante todo el día”, afirma el Dr. Rhodes a Fox News.
Una comida que combine carbohidratos complejos, proteínas y grasas saludables no solo te ayudará a mantener los niveles de energía, sino que también prevendrá las caídas bruscas de azúcar en sangre. Por ejemplo, una ensalada de pollo con aguacate y frutos secos es una excelente opción. Esta combinación de ingredientes no solo es nutritiva, sino que también ayuda a mantener la energía durante el resto del día.
Resiste la tentación de ‘picotear’
Uno de los errores más comunes es el constante picoteo a lo largo del día. Aunque puede parecer una buena idea para mantener el hambre a raya, este hábito puede hacer más mal que bien. Según el Dr. Rhodes, “los pequeños refrigerios a menudo no alcanzan los umbrales de saciedad de nuestro cuerpo”. En lugar de proporcionarte una fuente real de energía, estos snacks pueden causar picos innecesarios de azúcar en la sangre y, en consecuencia, provocar somnolencia.
Por ejemplo, si te decantas por snacks poco saludables como patatas fritas o dulces, puedes estar empeorando tu situación. Los alimentos ricos en carbohidratos simples no solo elevan tu glucosa en sangre de manera abrupta, sino que también pueden provocar cambios emocionales y confusión mental. En lugar de ello, opta por opciones más saludables como frutos secos, frutas o carnes de ave. Estos alimentos ricos en grasas saludables, fibra y proteínas pueden ayudarte a mantener la sensación de saciedad y equilibrar los niveles de glucosa en sangre.
Come un almuerzo rico en nutrientes
El Dr. Rhodes sugiere que la mejor manera de mantenerse lleno de energía es priorizar la densidad nutricional de tus almuerzos. Opta por comidas bajas en carbohidratos pero ricas en nutrientes, como ensaladas con pollo, verduras llenas de fibra, y grasas saludables como el aguacate y los frutos secos. Estas opciones ayudan a retardar la digestión y el vaciado gástrico, proporcionando una fuente constante de energía.
Además, un almuerzo equilibrado puede ayudarte a evitar el descenso abrupto de energía que suele ocurrir después de comer comidas muy pesadas o ricas en carbohidratos simples.
Cuidado con el café
El café es otro gran culpable de las caídas de energía. La cafeína en el café actúa sobre los receptores de adenosina en el cerebro, bloqueando su efecto sedante y ayudándonos a mantenernos despiertos. Sin embargo, cuando los efectos de la cafeína se desvanecen, la acumulación de adenosina puede provocar una sensación de fatiga y somnolencia.
Por lo tanto, si te encuentras bebiendo café en exceso para contrarrestar la fatiga, puede que estés exacerbando el problema a largo plazo. En lugar de depender de la cafeína, trata de implementar otras estrategias para mantener tu energía a lo largo del día.
Sal a caminar luego de comer
Finalmente, no subestimes el poder de una caminata después de comer. El Dr. Rhodes recomienda moverse tras las comidas para utilizar la energía consumida y mantener los niveles de glucosa equilibrados. Una simple caminata puede ayudar a reducir los picos de glucosa y a mantener la energía durante el resto del día.
Tomarte un breve descanso para caminar no solo puede ayudarte a mantener tus niveles de energía, sino que también te dará la oportunidad de despejar la mente y volver al trabajo con renovada concentración.