
No eres el único que se ha conmovido con “Mi año en Oxford”. Miles de espectadores en todo el mundo han quedado cautivados por esta producción de Netflix, la cual ha generado un gran revuelo en las redes sociales. La película, protagonizada por Sofia Carson en el papel de Anna De La Vega y Corey Mylchreest como Jamie Davenport, contiene todos los ingredientes para despertar suspiros, lágrimas y reflexiones sobre aquellos momentos cruciales en los que el amor y las decisiones trascendentales se entrelazan.
La trama sigue a Anna, una joven estadounidense ambiciosa que viaja a la Universidad de Oxford para cumplir el sueño de su infancia, con su vida completamente planeada. Sin embargo, su camino se cruza con el de Jamie, un encantador e inteligente habitante local que cambiará la vida de ambos para siempre. Su historia es un desgarrador tributo al amor que explora el autodescubrimiento y la madurez.
En tanto, si llegaste al libro “My Oxford Year” de Julia Whelan buscando más profundidad, te habrás dado cuenta rápidamente: hay diferencias notables entre la novela y su adaptación. No es raro, claro. Hollywood tiene sus propias reglas, y adaptar una historia al lenguaje cinematográfico muchas veces implica reescribir lo que ya conocíamos. Lo que sí me sorprendió fue cuántos cambios se hicieron. Algunos sutiles. Otros, bastante grandes.
Así que, si estás en ese punto donde terminaste la película y te preguntas: “¿Qué tanto cambiaron de la historia original?”, aquí te lo cuento con lujo de detalle. Eso sí, a partir de este momento tú decides si continuar o no con la lectura de este artículo, pues encontrarás muchos spoilers.

DIFERENCIAS ENTRE EL LIBRO Y LA PELÍCULA DE NETFLIX
1. Eleanor Durán y Anna De La Vega: dos protagonistas, dos mundos
Este fue el primer gran cambio que noté. En el libro de Julia Whelan, la protagonista se llama Eleanor Durán, es originaria de Ohio y llega a la Universidad de Oxford gracias a una prestigiosa beca Rhodes. Es una mujer inteligente, con ambiciones políticas claras, y que carga con una historia personal muy profunda.
En cambio, en la película, el personaje de Anna De La Vega (interpretada por Sofia Carson) tiene un perfil algo distinto: viene de Nueva York y su objetivo principal es conseguir un puesto en Goldman Sachs. Aunque sigue siendo ambiciosa, su enfoque profesional es mucho más corporativo, lo cual cambia el tono del personaje y sus motivaciones.

2. Del Capitolio a Wall Street: dos futuros posibles
La diferencia en los caminos profesionales de las protagonistas marca uno de los puntos clave del conflicto narrativo. Mientras que Eleanor, en el libro, es reclutada como asesora en una campaña política (una escena muy reveladora sucede en el aeropuerto de Heathrow), Anna ya tiene un pie dentro del mundo financiero.
Esto no es menor. La versión literaria pone a Eleanor en el centro de una elección que implica ideales, convicciones y una vocación pública. La película, por otro lado, coloca a Anna en una carrera profesional mucho más tradicional, lo cual cambia el foco de su dilema: ¿seguir su corazón o su carrera? Pero claro, no es lo mismo elegir entre política social y amor, que entre inversión financiera y una historia romántica en Oxford.
3. Un padre ausente vs. un padre presente
Una de las partes más emotivas del libro es el pasado de Eleanor: su padre murió en un extraño accidente de auto, algo que la marcó profundamente. Esa herida afecta su relación con su madre y su forma de vincularse emocionalmente con otros, incluido Jamie.
En la película, este trauma desaparece por completo. Anna tiene un padre vivo y aparentemente presente, lo cual cambia el trasfondo emocional del personaje. Esto impacta especialmente en la conexión con Jamie, ya que en el libro hay una escena muy íntima donde Eleanor se abre con él sobre su pérdida durante una noche de patinaje bajo las estrellas, con chocolate caliente incluido.
4. La relación con Jamie y el grupo de amigos
En la novela, ese vínculo con Jamie se da en escenarios más introspectivos y solitarios. En cambio, Netflix decide integrar más a los amigos de Anna: Charlie, Maggie y Tom, quienes terminan siendo parte clave del relato, aportando momentos de calidez, risa y ternura. Las escenas de “punting” (navegar por el río en pequeñas barcas) son pura vibra estudiantil.
Este cambio me pareció acertado para el tono de la película, que busca momentos más grupales y visuales, mientras que el libro apuesta más al crecimiento interno y a las conversaciones profundas.
5. Eddie vs. Oliver: el hermano de Jamie
La historia trágica de Jamie está presente en ambas versiones, pero con matices importantes. En el libro, su hermano fallecido se llama Oliver, y estaba comprometido con Cecilia. En la película, el hermano se llama Eddie, y Cecilia fue su novia, no su prometida.
Parece un detalle menor, pero cambia el nivel de compromiso emocional que Jamie tiene con Cecilia y con su propio duelo. Además, la forma en que este dolor se manifiesta en Jamie añade profundidad a su personaje, sobre todo cuando descubrimos lo que él mismo está enfrentando en silencio.
6. La gran mentira de la tesis
Ambas versiones nos presentan el momento en que Jamie se distancia bajo la excusa de estar trabajando intensamente en su tesis. Pero el descubrimiento de su mentira es distinto. En el libro, Eleanor intenta sorprenderlo y termina descubriendo, por sí sola, que no está en la Biblioteca Bodleiana como había dicho.
En la película, es la bibliotecaria Laura quien le dice a Anna que no ha visto a Jamie últimamente. Este pequeño cambio le quita a nuestra protagonista la agencia del descubrimiento, pero ayuda a mantener el ritmo del filme. Aun así, la tensión y el dolor que sigue a esa revelación están presentes en ambas versiones.
7. La verdad detrás del silencio
Quizás el giro más doloroso, tanto en el libro como en la película, es el mismo: Jamie no se está alejando por falta de interés, sino porque tiene cáncer, el mismo que se llevó a su hermano. Esta revelación cambia todo, y nos lleva al centro del dilema emocional de ambas protagonistas: ¿qué haces cuando te enamoras de alguien que está lidiando con su propia fecha de caducidad?
La diferencia radica en cómo se maneja este punto. En la novela, todo se siente más pausado, introspectivo. En la película, aunque el mensaje llega, lo hace con un toque más cinematográfico, con imágenes y montajes que sugieren más que mostrar explícitamente el deterioro emocional. Y sí, en esta parte creo que está permitido llorar.

8. Un final, dos caminos
Aquí llega uno de los cambios más significativos. En el libro, Eleanor termina comprendiendo que ella y Jamie no estaban destinados a estar juntos. Decide quedarse en Oxford, pero cancela su regreso a Estados Unidos y se aleja del mundo político, al menos por un tiempo. Hay un tono de cierre emocional fuerte, pero también realista.
En la película, Anna parece tomar el relevo de Jamie como profesora de poesía. La escena en la que ofrece pastel a sus nuevos alumnos, como hacía Jamie, es hermosa y simbólica. Además, hay un montaje de Anna viajando por Europa sola, pero imaginando que lo hace junto a Jamie. Es un cierre poético, más esperanzador, aunque más abierto.

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