La naturaleza es poderosa y a menudo impredecible. En los último días, España ha sido golpeada por una serie de lluvias torrenciales y fuertes inundaciones provocadas por un fenómeno conocido como DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos). Las imágenes que nos llegan son impactantes y muestran el gran impacto de este tipo de eventos climáticos. Sin embargo, entre las escenas de devastación, también encontramos ejemplos de resiliencia y eficacia en la ingeniería antigua, como la presa romana de Almonacid de la Cuba, en Zaragoza. Este monumento histórico, construido hace casi 2.000 años, ha demostrado ser un verdadero salvavidas para el pueblo al evitar que las aguas desbordaran y causaran una catástrofe.
La DANA y sus devastadores efectos en España
La DANA ha dejado en su paso por España más de 100 muertos y ha provocado pérdidas millonarias en varias comunidades. En particular, la Comunidad Valenciana ha sido la más afectada, con 91 muertes registradas, de las cuales 45 se produjeron en el municipio de Paiporta. Las cifras son alarmantes, y las lluvias han alcanzado niveles históricos, con algunos lugares recibiendo hasta 500 litros por metro cuadrado en un corto período de tiempo. Estos números reflejan la gravedad de lo que ha sido catalogado como la peor DANA de la historia en el país.
La situación es crítica: mientras la alerta roja estaba activa, la tormenta superó las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), lo que hizo que muchos municipios se enfrentaran a un riesgo inminente de inundación. En episodios anteriores de DANA, como en 2019, se reportaron daños que alcanzaron los 425 millones de euros. Con las condiciones actuales, se espera que las cifras de esta reciente DANA superen con creces esa cantidad.
La presa de Almonacid de la Cuba: un ingenio romano
Frente a este panorama de destrucción, la presa romana de Almonacid de la Cuba ha sido un ejemplo de cómo la ingeniería antigua puede seguir siendo efectiva en la actualidad. Esta obra monumental, construida en la segunda mitad del siglo I d.C. durante el reinado del emperador Augusto, es reconocida como la presa de mayor altura que se conserva de la época romana.
En un reciente vídeo que ha circulado por las redes sociales, se puede observar cómo el agua se almacenaba en la presa hasta su límite y luego caía de forma escalonada, evitando así un desborde. Esta gestión del agua ha aliviado al municipio de inundaciones, a diferencia de otros pueblos que no tuvieron la misma suerte. En Almonacid de la Cuba, no se han reportado daños ni heridos, lo que pone de manifiesto la eficacia de esta antigua construcción.
Historia de la presa
A pesar de que su construcción data del siglo I, la presa ha pasado por diversas modificaciones a lo largo de los años. Después de ser abandonada en el siglo III, fue reutilizada en la época musulmana como azud, es decir, un sistema para desviar caudales hacia los regadíos del entorno de Belchite, uso que perdura hasta nuestros días. La capacidad de adaptación de esta estructura a lo largo de los siglos es un testimonio del ingenio de sus creadores.
Las imágenes de la presa funcionando de manera efectiva han resonado en las redes sociales, donde numerosos usuarios han elogiado la maestría arquitectónica de la civilización romana. A pesar del paso de los siglos, estas estructuras continúan desempeñando un papel crucial en la gestión del agua, algo que es fundamental en un contexto donde los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más frecuentes.
La historia de la presa de Almonacid de la Cuba es un recordatorio de que la arquitectura romana no solo ha sobrevivido al tiempo, sino que también sigue siendo una herramienta vital para la protección de las comunidades actuales frente a desastres naturales.