Como parte de las negociaciones entre la Administración de Joe Biden y los republicanos para alcanzar un acuerdo sobre el techo de la deuda se vienen cocinando cambios en los requisitos para acceder al Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP, por sus siglas en inglés), conocido también como “cupones de alimentos”.
Este tema destrabaría y daría al mandatario estadounidense el apoyo que requiere para poder eliminar el tope de la deuda federal (31,4 billones de dólares) durante dos años. Y es que entrar en default pone en riesgo el cumplimiento de compromisos financieros, como pagos del seguro social, y amenaza a la economía mundial. La idea es que el gobierno siga pidiendo dinero prestado y continúe solvente.
A cambio de evitar este escenario sin precedentes, los republicanos han podido aprovechar la coyuntura para imponer temas que venían impulsando, varios de estos relacionados con diversos programas sociales destinados a personas de escasos recursos. En la lista aparece SNAP.
¿QUÉ ES SNAP?
El Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP, por sus siglas en inglés), anteriormente conocido como cupones de alimento, ayuda a las personas de escasos ingresos y recursos económicos a comprar alimentos nutritivos.
Se trata del programa de asistencia de nutrición federal más grande, pero administrado por agencias estatales por medio de oficinas locales.
¿CUÁLES SERÍAN LOS NUEVOS REQUISITOS PARA ACCEDER AL SNAP?
Se conoce que en el acuerdo entre la Administración Biden y los republicanos, encabezados por el líder de esa mayoría en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, se contemplan cambios en el SNAP, según una hoja informativa distribuida por los republicanos de la Cámara de Representantes, de acuerdo con Diario NY y CNN.
Los adultos de 18 a 55 años sin hijos y sanos solo podrían recibir cupones de alimentos durante tres meses de cada tres años, a menos que trabajen al menos 20 horas a la semana o cumplan otros requisitos.
En la actualidad, ese mandato se aplica a las personas de 18 a 49 años. La exención abarcaría a las embarazadas o a los inscritos en programas de educación o de abuso de sustancias; y se ampliaría para los veteranos, las personas sin hogar, entre otros. Todos los cambios finalizarían en 2030.
Para los republicanos elevar el requisito laboral hará que más personas se integren al mercado laboral y paguen impuestos, en consecuencia, esto ayudará a sostener ese y otros programas como Seguro Social y Medicare.
En contraparte, muchos demócratas sostienen que el endurecimiento de los requisitos reducirá el número de estadounidenses que podrían comprar alimentos o que serían elegibles al programa.