Verano largo, ¿cómo conservar mejor los alimentos ante el aumento del calor?

Mantener los alimentos en buen estado resulta en muchas ocasiones una tarea complicada para las personas, el aumento del calor y la prolongación del verano por los recientes fenómenos naturales, dificulta el traslado de los alimentos al trabajo, oficina y/o colegios. ¿Cómo cuidar mejor el estado de la comida?

La crisis climática que atraviesa el planeta ha dificultado la preservación de los alimentos en todas partes del mundo, dado que el verano aumenta considerablemente los riesgos biológicos como bacterias, parásitos, virus y toxinas por el calor durante su traslado.

Ello, merma considerablemente la salud de los alimentos, que puede traducirse en daños colaterales para las personas que lo ingieren. Lo cual puede generar enfermedades que van desde una leve intoxicación alimentaria, hasta graves como hepatitis A, cólera u otros.

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¿Por qué es importante cuidar mejor los alimentos ante el calor?

La principal causa de deterioro de los alimentos es el ataque enzimático y la proliferación de microorganismos que degradan la composición de estos.

Para que no se genere el peligro, los alimentos deberán mantenerse en una temperatura entre -4ºC y -7ºC, básicamente con los mismos valores de un electrodoméstico de enfriamiento.

Según Fernando Duthurburu, gerente comercial de Logística de Valor Agregado de Ransa, la gestión de la temperatura tiene que estar acorde con los requerimientos específicos de cada tipo de producto, lo cual juega un rol crucial en el mantenimiento de su calidad e inocuidad.

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Al respecto, el ejecutivo brindó una serie de consideraciones para revisar y tomar en cuenta a la hora de velar por la inocuidad de los alimentos:

• Temperatura. Debemos tener en cuenta sus características, tiempos de conservación del producto, tipo de refrigerante y el control de temperatura que requiera.
• Empaques. De acuerdo con el producto, se debe empaquetar herméticamente para evitar cambios de temperatura.
• Climatización. Es esencial asegurarse de que una gran proporción del aire frío circule pasando a través y no solo en torno a la carga.

¿Cómo preservar mejor los alimentos?

La inocuidad alimentaria es una condición que exime al alimento de todo riesgo que atente contra la salud del consumidor.

En el caso de las loncheras, también es importante considerar su preservación inocua. Según la nutricionista Saby Mauricio, directora de Nutrición y Dietética de la Universidad Norbert Wiener, el empaque es un elemento que juega un rol determinante en su traslado al colegio.

“Con envases con tapas herméticas o en su defecto en bolsas de almacenamiento selladas. Una lonchera fácil de limpiar y térmica ayuda a conservar mejor la temperatura”, señaló.

También recomendó no exponer la lonchera al sol, mantenerla en lugares frescos y sombreados. “Colocar una botella de agua helada para preservar el frío. Si se lleva fruta, de preferencia con cáscara”, dijo.

“Una forma de asegurarnos de consumir alimentos inocuos es verificar la fecha de vencimiento, observar que estén correctamente sellados o tapados, que tengan registro sanitario y que presenten olores y colores característicos de dicho alimento”, señaló Oscar Jordán, director de Escuela de Ingeniería en Industrias Alimentarias de la Universidad Le Cordon Bleu.

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Sobre este tema, el especialista brindó 5 reglas fundamentales que debemos tener en cuenta para evitar riesgos en la conservación de los alimentos:

• Mantener una limpieza adecuada: Lavar y desinfectar los alimentos con agua limpia al momento de consumirlos para así eliminar a todos los microorganismos que puedan estar presentes en ellos.
• Separar alimentos crudos de cocidos: Usar utensilios diferentes (cuchillos y tablas) para cada tipo de alimento.
• Cocinar completamente los alimentos: Sumergir los alimentos en agua hirviendo ayuda a matar la mayor parte de bacterias peligrosas que habitan en dichos alimentos.
• Mantener los alimentos a temperaturas seguras: Esto puede variar de acuerdo a la naturaleza del alimento, se pueden almacenar los alimentos secos o de baja humedad en envases herméticos, los alimentos húmedos se deben almacenar en refrigeración y/o congelación y los alimentos con humedad elevada pero sellados o envasados como leche, conservas, mermeladas, entre otros, pueden conservarse al ambiente siempre que no hayan sido abiertos.
• Usar agua y materias primas seguras: El agua que se utiliza para lavar los alimentos, utensilios de cocina y para la preparación de alimentos puede ser hervida, clorada o purificada para así evitar enfermedades del estómago como la diarrea o vómitos.

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