“Giacometti, hacia la Figura Final” es el título que lleva la muestra que se inauguró el 13 de noviembre en el Museum of Fine Arts de Houston. La muestra itinerante, organizada por la Fundación Giacometti, reúne 60 obras de posguerra del artista, realizadas entre 1945 y 1960.
Nacido en Suiza, en el cantón del Ticino, Alberto Gicacometti (1901-1966) es uno de los escultores más prestigiosos del siglo XX. Su trayectoria artística se desarrolló fundamentalmente en París, ciudad a la que llegó en 1922, poco antes de la publicación del Manifiesto Surrealista por André Breton en 1924.
Si bien Giacometti originalmente se identificó con el surrealismo, su obra y su personalidad se alejaron de la estridencia del movimiento, para poco a poco ir depurándose y convertir su escultura en una metáfora del aislamiento del hombre en el mundo contemporáneo. Deliberadamente figurativo, en un mundo en el que predomina la abstracción; con su producción artística Giacometti reafirma de alguna manera la soledad en la que vive el ser humano.
Sus figuras rugosas, ásperas, que parecen inacabadas y que nunca caminan en la misma dirección cuando están agrupadas, que dan la sensación de estar hechas para desintegrarse en el espacio por su fragilidad, son producto de una mente que ha vivido los horrores de la segunda guerra mundial, y de la guerra fría.
Giacometti es consciente que la sociedad atraviesa por una crisis de valores, y que no han surgido nuevos para reemplazar a los caducos. En ese sentido no es difícil establecer su identificación con la obra de escritores existencialistas contemporáneos como Jean Paul Sartre, de quien fue amigo, o incluso del siglo anterior, como Friedrich Nietzsche.
Es precisamente Sartre el que dice de su obra: “Nunca la sustancia fue menos eterna, más frágil, casi humana”. Es precisamente esa fragilidad y la aparente vulnerabilidad de los personajes de Giacometti, la que nos acerca al artista y nos permite conectarnos con su mundo, con la soledad infinita, con preguntas sin respuesta y dedicarnos simplemente a contemplar cómo el metal se transforma, se derrite, para hacer de Giacometti un artista sin discípulos, pero también sin detractores, que a lo largo de su vida solo generó la misma admiración con la que nos acercamos todavía hoy a su obra.
Claves “Giacometti, hacia la Figura Final”
- Dónde. La muestra se puede ver en el Museum of Fine Arts de Houston, Texas de jueves a sábado de 11:00 a.m. a 5:00 pm y los domingos de 12.30 pm a 6:00 p.m.
- Muestra. La exposición reúne desde fotos del artista en su estudio de Montparnasse hasta la evolución de su obra a lo largo de 15 años que van definiendo su estilo.
- Influencias. Joan Miró, Salvador Dalí, André Breton, Henri Matisse y muchos otros artistas del París de los años 20 y 30 del siglo pasado impactaron la formación de Giacometti.
Sobre la autora
Liliana Checa es bachelor y máster of Arts por la Universida de Nueva York (NYU) y máster of Philosophy por el King’s College de la Universidad de Londres. Ha ejercido la docencia en la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), en la escuela de arte Corriente Alterna y en la Universidad de Ciencias y Artes de América Latina (UCAL). Actualmente es docente en la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC). Es panelista de la plataforma colombiana de difusión de la cultura www.ilustre.co