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2 / 10 FOTO 2 | JULIO RAMÓN RIBEYRO (Tristes querellas en la Vieja Quinta). El gordo inició una caminata oblicua, fue en dirección del parque, pasó persignándose frente a la parroquia, observó con parsimonia una vieja residencia, tomó la alameda Ricardo Palma y, cosa que extrañó a Memo, cruzó los rieles del tranvía rumbo a Surquillo. Este barrio siempre le había inspirado a Memo desconfianza. En muchas de sus calles se afincaban indigentes, borrachines, matones y rufianes. El gordo anduvo de un lado a otro, aparentemente desprevenido, hasta que entró a una chingana de trasnochadores. Acodado en el mostrador pidió una cerveza y al beber el primer trago su fisonomía se transformó, abandonó todo lo que en ella había de inseguridad y de desarraigo, como la de un hombre que regresa a su hogar luego de una penosa aventura.
3 / 10 - / - FOTO 3 | JORGE EDUARDO EIELSON ( “Guardo de Lima una botella…”). Guardo de Lima una botella Llena de lluvia Y un puñado de arena En el pañuelo. A veces recuerdo La luz de su nublado cielo Y la acaricio Como se acaricia una perla En el bolsillo
4 / 10 FOTO 4 | JORGE EDUARDO BENAVIDES (El año que rompí contigo). En Lima, capital mundial de la desesperanza, el tiempo había empezado a remover despacio sus dedos lentos de garúa y niebla depositando charcos, fango y una suave pátina de melancolía sobre las calles (…). Los edificios de centro, antiquísimo reducto de prosperidad, respondían con sombras y hollín a los bocinazos impacientes de un tráfico vespertino y perdido en las caóticas rutas siempre improvisadas…
5 / 10 FOTO 5 | LUIS HERNÁNDEZ ( Zweite Fassung). De tarde en Agua Dulce Enlazas tu corazón A nadie y tu recuerdo Me permite la dicha A través de latas Guijarros y el óxido Tenue de las embarcaciones
6 / 10 FOTO 6 | BRYCE ECHENIQUE (Una mano en las cuerdas). El Country Club es uno de los hoteles más alegantes de Lima, y dicen que tiene más de cien habitaciones. Está situado en San Isidro, barrio residencial, a unos veinte minutos en automóvil del centro de Lima, y rodeado de hermosos jardines.
7 / 10 FOTO 7 | ÓSCAR MALCA (Ciudad de M) Pese a todo, Magdalena es un buen barrio para vivir. Sus habitantes sostienen que es como Barranco, peor conservado y mucho menos promocionado. Con San Miguel –uno de los distritos con los que limita– ocurre lo mismo. Los dos poseen el nimbo de las ciudades secretas: grandeza pérdida, apatía y deterioro, violencia y seducción, acantilados, mar otra vez, como la canción.
8 / 10 FOTO 8 | MAGDA PORTAL (sobre Barranco). Mar de alegría Yo soy un Mar pupilas de crepúsculo i voz de aurora Como ese mar azul al que yo desperté en mi primer viaje Aquel mar de los brazos abiertos de la perenne juventud Donde se posa mi Esperanza gaviota blanca con las pupilas rosas Yo soy un Mar
9 / 10 FOTO 9 | CARMEN OLLÉ (Tener 30 años). He vuelto a despertar en Lima a ser una mujer que va midiendo su talle en las vitrinas como muchas preocupada por el vaivén de su culo transparente. Lima es una ciudad como yo una utopía de mujer.
10 / 10 FOTO 10 | JAIME BAYLY (en la Columna "La hombría y el éxtasis"). Mi sueño era conocer el estadio Nacional de Lima (…) Hasta que llegó el fin de semana y fui a la cancha. Tenía plata, bastante plata, así que pude comprar un asiento en la tribuna occidente, la mejor, la más cómoda. Jugaban Cristal y Universitario, Sporting Cristal y la "U". Yo me había hecho hincha de Cristal porque tenía un equipo de ensueño.
FOTOS | La capital cumple hoy 484 años desde su fundación. Poetas y narradores han mantenido una relación a veces cercana y otras distante con esta ciudad. Vínculo que se vio reflejado en las páginas que escribieron desde su particular mirada.