Las cinco debilidades en una entrevista que puedes revelar a un reclutador

FOTOGALERÍA. Tu currículum no lo es todo. Saber transmitir las soft skills que atesoras es también fundamental para conseguir el empleo de tus sueños. Tu experiencia formativa y profesional será el primer filtro, pero es en la entrevista de trabajo con un reclutador cuando vas a mostrar lo que sabes. También darás una aproximación definitiva a cómo es tu personalidad, según el portal universia.

Es, por lo tanto, recomendable que te prepares a conciencia esa entrevista con el reclutador. Aprende todo lo necesario sobre la empresa, estate al tanto de sus últimas actualizaciones y repasa tus conocimientos específicos sobre el puesto al que optas. En ese primer contacto son fundamentales los aspectos formales: sé puntual, plantea dudas y ofrece aportaciones que muestren que eres una persona proactiva y con ganas de aprender.

Mostrar las debilidades en positivo

En un reciente artículo en CNBC, la consultora de empresas Ann Hiatt explicaba las claves para impresionar en una entrevista de trabajo. Y, más allá de su profesional actual, Hiatt es una referencia en este aspecto. Fue una figura clave en la eclosión de Silicon Valley y formó parte del crecimiento de empresas como Amazon o Google. Para acceder a esos puestos hubo de entrevistarse con los principales responsables de aquellas empresas, como Jeff Bezos.

Entre otros aspectos, Hiatt señala la importancia de explicar las aficiones siempre que puedan tener una referencia al empleo al que optas o de hablar siempre en plural, refiriéndose al equipo, nunca a uno mismo. Y más allá de eso, describe la importancia de mostrar las debilidades, pero siempre en positivo. Reconocer errores en el desarrollo de algún proyecto o confesar algunos aspectos de la profesión que desconoces y que te estimula aprender ayuda a establecer una buena conexión con el reclutador.

Exponer las debilidades propias es una buena forma de mostrarnos humildes y generar confianza en la persona que nos entrevista. Nadie lo sabe todo. Nadie lo hace todo bien. Reconoce que tú tampoco, pero muéstrate siempre dispuesto a aprender para conseguir convertir esa debilidad en una fortaleza.

Algunas debilidades que puedes indicar

Para que la entrevista discurra según tus intereses, reconoce debilidades que puedas superar y que no te comprometan como trabajador de la empresa.

“A veces me cuesta pedir ayuda”

El trabajo en equipo es una de las habilidades que más se valoran en cualquier empresa. Contar con tus compañeros y que ellos cuenten contigo es fundamental para el correcto desarrollo del día a día. Cuando expresas que en ocasiones te refrenas en el momento de pedir ayuda estás reconociendo que es un aspecto en el que deseas mejorar y que consideras importante para lograr el mejor resultado. Es una debilidad que un reclutador considera superable y que despierta la confianza en ti de la persona que te entrevista.

“Solía centrarme en un único proyecto, pero estoy mejorando en este aspecto”

Es habitual que un proyecto específico nos lleve más tiempo y merezca nuestra atención prioritaria. En ocasiones, esto puede provocar que descuidemos otras tareas. Si te ha pasado y has sido capaz de solventarlo, puedes señalarlo en la entrevista con un reclutador. Se trata de una debilidad muy común y confesarla genera empatía. Explicar cómo te organizas para impedir que esto ocurra de forma habitual es una buena fórmula para destacar tu capacidad de superación.

“Necesito aprender más sobre…”

Evita mostrarte con un todoterreno. Cualquier puesto de trabajo requiere de varias habilidades y de distintos conocimientos. En algunos de ellos serás especialista, pero en otros tendrás que profundizar. Di la verdad. Si hay un tema en el que necesitas mejorar, explícalo, pero siempre indicando que te estimula mucho aprender, que el nuevo puesto de trabajo es también una oportunidad para que mejores tu perfil profesional.

“Antes entregaba los trabajos en la fecha límite, pero he aprendido a organizarme mejor”

Es importante que describas la forma en que estructuras tu calendario y explicando esta debilidad que estás mejorando puedes hacerlo. La organización es clave para todas las empresas y contar con empleados capaces de llegar con el tiempo suficiente a las entregas resulta fundamental. Este es un punto que genera dificultades en muchos trabajadores. A nadie le sorprenderá que a ti te pase. Explicar que estás tratando de solventarlo va a dar muy buena imagen de ti.

“Me pongo nervioso cuando no soy capaz de entender algo”

Con esta frase estás indicando que eres una persona perfeccionista, que buscas comprender por qué haces tus tareas y saber al detalle cómo se hacen. Se trata de una debilidad que se soluciona fácilmente pidiendo ayuda a los compañeros. Confesar este tipo de situaciones ofrece confianza al reclutador.