Stephen Hawking fue una de las mentes más grandes y célebres de nuestro tiempo, conocido por su trabajo pionero en cosmología y física teórica. Fue director de investigación del Centro de Cosmología Teórica y Profesor Lucasiano de Matemáticas en la Universidad de Cambridge. A los 20 años se le diagnosticó una enfermedad neuronal motora (también conocida como ELA o enfermedad de Lou Gehrig) con lo cual se consideraba que tenía dos años de vida, según el portal Yahoo.
Sus capacidades de movimiento y de comunicación se limitaron al extremo. Estuvo confinado a una silla de ruedas y se vio obligado a hablar con un sintetizador de voz. Cuando murió en marzo de 2018, a la edad de 76 años, era el superviviente más longevo en el planeta de la enfermedad que padecía. Su lucha contra su condición fue expuesta en la película “La teoría del todo” (2014).
Todo lo que consiguió, a pesar de su padecimiento neuronal motor, abrió nuevos caminos sobre las leyes básicas que rigen el universo, incluida la revelación de que los agujeros negros tienen una temperatura y producen radiación, fenómeno conocido como radiación de Hawking. Al mismo tiempo, trató de explicar muchas de estas complejas ideas científicas a un público más amplio a través de libros populares, sobre todo su best seller “Una breve historia del tiempo” publicado en 1988.
Recibió la CBE en 1982. Fue nombrado Compañero de Honor en 1989 y se le concedió la Medalla Presidencial de la Libertad en 2009, otorgada por el Presidente Barack Obama. Recibió numerosos premios, medallas y galardones, como la Medalla Copley de la Royal Society, el Premio Albert Einstein, la Medalla de Oro de la Royal Astronomical Society, el Premio de Física Fundamental y el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en Ciencias Básicas. Fue miembro de la Royal Society, de la Academia Pontificia de Ciencias y de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos, entre otros.
Pero una de las mejores cosas que trajo a la luz Hawking es, sin duda alguna, su libro, “Una breve historia del tiempo”. Escrita en un lenguaje bastante accesible, la obra ayuda incluso a los no científicos a entender por qué existe el universo, cómo empezó y cómo será en el futuro.
Y del futuro nos queremos ocupar aquí. Hawking supo entender lo que había pasado en el Universo, así como también lo que vendría en nuestro planeta según los avances de la ciencia.
1.- Contacto alienígena
Todos hemos planteado el encuentro entre los terrícolas y los seres extraterrestres. Y todo esto nos lleva a una planeta extra solar llamado Gliesse 832g, el cual podría albergar vida similar a la de nuestro planeta, precisamente porque es similar a la Tierra y está “cerca”.
En el caso potencial en que encontremos vida allí, o en algún otro lugar, o que nos visiten los extraterrestres, Hawking apuntó que hay que guardar cautela.
El físico creía que ese mundo lejano, Gliese 832c, podría albergar vida extraterrestre y que, en algún momento, la Tierra podría ser contactada por criaturas de dicho exoplaneta. Sin embargo, advirtió que los seres humanos deben ser cautelosos al relacionarse con las formas de vida desconocidas. Muchos han especulado sobre cómo sería el encuentro con la vida extraterrestre, pero Hawking tiene su propia predicción sobre cómo podrían chocar el hombre y la vida extraterrestre.
“Algún día podríamos recibir una señal de un planeta como éste, pero deberíamos ser cautelosos a la hora de responder. Encontrarse con una civilización avanzada podría ser como el encuentro de los nativos americanos con Colón. Eso no resultó tan bien”. Afirmó Hawking.
2.- Cambio Climático
“Gran peligro” declaró el científico a la BBC en una entrevista de 2017. Explicó que la Tierra podría acabar teniendo el mismo destino que nuestro planeta vecino Venus si el calentamiento global alcanza su umbral.
“Estamos cerca del punto de inflexión en el que el calentamiento global se vuelve irreversible.” En aquel momento el Presidente Donald Trump decidió que Estados Unidos saldría del acuerdo climático de París lo cual hacía avizorar un posible destino: “podría empujar a la Tierra al borde del abismo, para que se vuelva como Venus, con una temperatura de doscientos cincuenta grados, con lluvias de ácido sulfúrico”. sentenció el teórico.
3.- Modificación genética
“Competencia de super humanos” así describió el físico la posibilidad de que los más poderosos transformaran la especie. “Más inteligentes, más fuertes y más longevos. Lo que pasaría con el resto de los mortales sería que nos extinguiremos o dejaremos de ser importantes”.
Es así como en algún momento Hawking asumió la posibilidad de que la ingeniería genética creará una nueva especie de súper humano que pueda destruir al resto de la humanidad.
Hawking planteó la posibilidad de que los avances en genética pudiesen hacer atractiva la idea de que las personas traten de mejorarse a sí mismas, con implicaciones para los “humanos no mejorados”.
4.- Inteligencia Artificial
La eminencia también tuvo algo que decir acerca de los avances de la IA. Gracias a un reemplazo en su sistema de voz sintetizada que utiliza Inteligencia Artificial, Hawking tenía una nueva tecnología que aprendía cómo pensaba Hawking y que le sugería palabras que podría utilizar a continuación.
A partir de esto el científico afirmó a la BBC que “El desarrollo de la inteligencia artificial completa podría suponer el fin de la raza humana”.
También explicó su punto de vista al respecto en una entrevista con Wire Magazine: “Temo que la IA pueda sustituir a los humanos por completo. Si la gente diseña virus informáticos, alguien diseñará una IA que se replique a sí misma. Será una nueva forma de vida que superará a los humanos.”
5.- Exploración espacial
Ante un ominoso panorama para el planeta, Hawking, quizá no tan a modo de predicción, aseguraba que la mejor manera de que la especie sobreviviera era colonizar el Sistema Solar.
“La diseminación puede ser lo único que nos salve de nosotros mismos. Estoy convencido de que los seres humanos deben abandonar la Tierra” afirmó.
En primer lugar recalcó que lo primero que el hombre debería pisar nuevamente es la Luna. “Cada vez que damos un nuevo gran salto, como los alunizajes, unimos a personas y naciones, damos paso a nuevos descubrimientos y nuevas tecnologías”,
El científico era un entusiasta de los vuelos espaciales. En 2007, voló a bordo del avión Boeing 727 de Zero Gravity Corp., que realiza trayectorias parabólicas que permiten a los pasajeros experimentar breves períodos de ingravidez. Hawking dijo entonces que consideraba el vuelo como un paso hacia un auténtico viaje espacial.
También Richard Branson dispuso para Hawking un boleto gratis para atravesar el espacio alrededor de la Tierra como tripulante de Virgin Galactic en su Virgin Space Ship “Richard Branson me ha ofrecido un asiento en Virgin Galactic, y he dicho que sí inmediatamente”. Lamentablemente nunca pudo lograrlo.