La expansión urbana que motivará el puerto de Chancay en el distrito que lo alberga genera una indudable presión sobre la prestación de servicios básicos. Frente a ello, un proyecto de ley del Congreso plantea que se cree una Empresa Prestadora de Servicios de Saneamiento (EPS) exclusiva para atender a Chancay.
Esta iniciativa tuvo un trámite exprés en el Congreso. La congresista Rosselli Amuruz presentó el proyecto de ley N° 09704 el 5 de diciembre y el 13 del mismo mes fue exonerado por la Junta de Portavoces del trámite en comisiones, entrando así a la agenda del pleno del Congreso.
Sin embargo, no llegó a ser votada en la máxima instancia del Legislativo antes que cierre la legislatura. ¿Es viable y técnicamente sostenible el planteamiento de una EPS enfocada en un solo distrito? Especialistas consultados por Gestión creen que no. Aquí los motivos.
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Contrarreforma
Actualmente quien vela por el saneamiento en Chancay es la EPS Huaral, que administra toda la provincia. Lo que busca la congresista Amuruz es elevar al grado de EPS a la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Chancay (Emapa Chancay), adscrita a la EPS provincial hoy en día.
La razón detrás, sostiene la legisladora, es que la Emapa Chancay necesita facilidades burocráticas para poder promover mayores proyectos de inversión pública en el distrito. Para los especialistas consultados por Gestión, esta afirmación carece de sustento técnico y financiero para justificar una EPS tan atomizada.
“El objetivo de crear una EPS es que todas las zonas poblacionales tengan cobertura. Si se crea una EPS de forma excepcional, bajo administración municipal, es porque no hay otra que cubra ese espacio. Aquí ese no es el argumento, sino que aparentemente Chancay será más atractivo que la provincia. Bajo esa premisa alguien podría decir creemos la EPS San Isidro o La Molina”, explicó Julián Li, socio de Recursos Hídricos en PPU.
Para Milton Von Hesse, extitular del Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), la propuesta de Amuruz va en contra de lo que el ministerio ha impulsado este año a partir de cambios normativos a la norma que rige las EPS: fortalecer las 50 ya existentes, muchas de ellas con problemas financieros, e incluso analizar la fusión de algunas de ellas.
“Todos los diagnósticos apuntan a consolidar las EPS existentes y no seguir separándolas. La viabilidad técnica y financiera de una EPS es no tener menos de 100,000 conexiones. Hoy, EPS Huaral tiene 19,000. Si la parten, la nueva EPS no tendrá un punto de equilibrio. No es viable”, estimó.
Tanto Li como Von Hesse también coinciden en lo peligroso que es que el Congreso decida, por ley, la creación de más entidades públicas, como ya han hecho con las universidades recientemente, sin mayor análisis técnico. En su proyecto, la congresista Amuruz solo indica que informes de Sunass del 2023 remarcaron que la Emapa Chancay era sostenible.
“Es una práctica que atenta contra la institucionalidad del país. Si siempre, de forma excepcional para las EPS, tratamos de cubrir cualquier aspecto que política o socialmente se busca, ¿cuándo consolidamos lo general, las EPS que ya existen?”, cuestionó Li.
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Otras salidas
Aunque no resultaría la mejor alternativa, sí es verdad que el problema que el proyecto de ley busca solucionar es real: existe un riesgo potencial para la cobertura de servicios de agua y saneamiento en Chancay.
Actualmente habitan el distrito unas 56,909 personas y se proyecta que, por la dinámica del puerto, al 2034 vivan allí más de 216,036 habitantes, según resalta Amuruz. La congresista, con datos del INEI y otras entidades públicas, advierte que el 30% de la población actual de Chancay no accede a un servicio eficiente de agua potable y el 40% tampoco accede al servicio de alcantarillado.
Esta situación, sin duda, amerita una solución. Para Von Hesse, la mejor opción es seguir apostando por que el sector privado se involucre más en la gestión de las EPS ya existentes.
“En 2013 se intentó una reforma que hoy no sigue: consolidar las EPS pequeñas, darles un tamaño adecuado y, a través de un régimen de administración temporal, hacer alianzas con el sector privado, dejando de ser empresas municipales, para mejorar su eficiencia”, indicó.
También una salida más a largo plazo son las Asociaciones Público-Privadas (APP) en el sector saneamiento. Como contó Gestión, ProInversión tiene el ambicioso objetivo de promover 16 APP de este tipo por US$ 2,451 millones entre 2025 y 2026.
Si bien en ese paquete no hay una obra en Huaral o el mismo Chancay, el MVCS firmó en abril dos convenios con la municipalidad del distrito para promover proyectos de agua potable y alcantarillado en la zona.
Además, impulsarían una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR). En julio, la cartera anunció que el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) presentó una carta de intención de US$1.5 millones para financiar estudios de preinversión de este tipo.
Otra alternativas, bajo ese mismo enfoque, la permiten el mismo sistema normativo de las EPS actual y el de las propias municipales, resaltó Li. “Las APP son una. Otra son las contribuciones reembolsables. En la propia ley existe ese mecanismo. Un privado, para hacer posible su conexión, financia parte de la red pública y luego recibe como devolución el monto que aportó, con una valorización”, explicó.
El abogado también recordó que las municipalidades pueden, en áreas específicas de su jurisdicción, celebrar contratos de explotación, en este caso, para promover servicios de saneamiento.
“El problema no se resuelve creando más EPS, sino desarrollando más infraestructura. La EPS Chancay tendría los mismos problemas que las ya existentes. En todo caso, podrían reforzar la EPS Huaral”, agregó.
Para Von Hesse, una salida más agresiva incluso sería que Sedapal, “la única EPS que funciona en el país” a su juicio, absorba a su similar de Huaral, las de Lima Norte, Cañete y Barranca.
“Pensar que partir la EPS Huaral en dos y darle al alcalde distrital el manejo de una empresa cuando no tienen la capacidad gerencial para hacerlo es una locura. Así, el puerto de Chancay estaría más lejos de tener servicios de agua y saneamiento de calidad”, advirtió.
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Licenciado en Periodismo por la Pontificia Universidad Católica del Perú, donde escribió en el portal Somos Periodismo y la revista Impresión. Parte del equipo fundador del medio digital Sudaca. Especializado en áreas como inversión pública, construcción, saneamiento y economías ilegales.
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