Alfredo Thorne, ex ministro de Economía y Finanzas, director de Thorne & Associates, señala que para que regresen a invertir en nuestro país se necesita un shock de confianza muy importante que no ve que Perú lo pueda dar. De otro lado, indica que el Congreso debería pedir cuentas al MEF sobre cuánto está gastando en subsidios.
¿En el contexto de incertidumbre que tenemos, han cambiado las últimas proyecciones de Thorne & Associates sobre nuestra economía?
En el contexto actual es riesgoso hacer nuevas proyecciones; por ahora hemos decidido mantener las últimas (estimadas a fines de noviembre). Así, para este último trimestre esperamos un crecimiento de 0.8%, respecto a similar período del 2020, que probablemente con la paralización de Las Bambas va a tornarse negativo, pero de ahí hacer cambios en las proyecciones de 2022 o 2023, es prematuro.
Entonces para el verano tampoco prevén un gran cambio en las proyecciones
El 2.7% de crecimiento que mantenemos para el 2022, prevé que la mejora de la economía se daría recién a fines de año o inicios del 2023. En el primer trimestre esperamos 1.6% y recién para el cuarto trimestre un 3.3% (respecto a similares períodos del 2020)
En sus nuevas proyecciones el BCR mantuvo 3.4% de crecimiento para 2022. ¿La diferencia con ustedes está en la proyección de la inversión privada?
Sí, ellos la mantienen en 0% y nosotros estimamos que caerá 6.2% (Ver tabla), por lo que está pasando en minería y con el agotamiento del ciclo de la construcción, sobre todo la autoconstrucción. Nosotros estamos a la mitad de la proyección del BCR para la inversión privada (0%) para el 2022 y una caída de 12%, de algunas consultoras.
¿A qué se refiere cuando dice que hay un agotamiento del ciclo de la construcción?
Hay tres factores que afectan esta actividad. Esta el lado minero, una vez que acabe la inversión de Quellaveco (en el 2022) prácticamente ya no hay otro proyecto minero grande; la inversión pública viene cayendo en octubre y noviembre y esperamos que caiga este mes; y, la construcción de viviendas y la autoconstrucción se vienen desacelerando.
¿Podría detallar esto último?
Había un impulso positivo de la construcción de viviendas, que representaba casi el 50% de la inversión privada, pero que era resultado de la venta rápida de un stock de proyectos, que se suspendieron por la pandemia, cuando se reabrió la economía; ahora no vemos nuevos proyectos; lo mismo ha pasado con la autoconstrucción que tuvo un impulso por la pandemia, pero una vez que se reabrió la economía ese efecto casi se extinguió. La confirmación de todo eso fue la caída de la construcción en octubre (-3.1%).
De hecho, ustedes prevén una caída para la construcción en el 2022 de 5.2% (Ver tabla), ¿mantienen esa proyección?
Si, correcto, la mantenemos, por los factores que señalé.
Respecto a otros sectores que venían repuntando este año como comercio y servicios, ustedes proyectan tasas moderadas para el 2022 ¿A qué se debe?
Siempre dijimos que había riesgo de una tercera ola de la pandemia y los números de contagios actuales muestran que prácticamente estamos subidos en ella, y una vez que se transparenten las cifras, eso se va a traducir en un menor crecimiento de la economía, lo cual afecta a servicios y comercio por las restricciones que ya está poniendo el Minsa a algunas actividades.
El ministro de economía hizo un balance de estos primeros meses, en el campo económico, pero no dio perspectivas para el 2022 ¿Qué opina?
Bueno, imagino que ha querido dar las buenas noticias, pero no las malas; además es difícil dar perspectivas cuando la mina más importante del país (Las Bambas) está prácticamente parada. En su último Marco Macroeconómico Multianual (MMM) proyectaron un crecimiento de 4.8% de crecimiento de la economía, tasa que está en el presupuesto público 2022. Y si el MEF cambia esa proyección, tendría que ajustar el presupuesto. Supongo que el MEF deberá trabajar para ajustar las cifras a la baja respecto del MMM.
EXPORTACIONES
Otro motor que ha venido empujando a la economía peruana es la exportación, ¿Cómo ve el panorama de nuestras ventas al exterior?
Tenemos una proyección de crecimiento bastante moderada de las exportaciones para el 2022, de 7.4%; el aumento que hemos tenido de las exportaciones prácticamente ha venido por el valor (precios) y no por el volumen (Ver gráficos); además el tema de China es más severo de lo que se piensa.
¿A qué se refiere con lo último?
Se proyecta que la economía China va a crecer prácticamente a 4.5% en el 2022 cuando venía creciendo a 9%; es una desaceleración dramática y se trata de nuestro primer socio comercial, sobre todo en materias primas. Además, la evolución de crecimiento de nuestros principales socios comerciales indica que China tienen la caída más drástica (Ver gráfico), mientras que EE.UU y Europa se mantienen. Creo que estamos en el punto más alto de precios de los commodities.
¿Podría ocurrir la tormenta perfecta para Perú en el 2022, con un sector externo que se ralentiza, el tapering y la incertidumbre política interna?
Lo que hemos tenido en el 2021 es un hipo muy fuerte de crecimiento producto de las políticas monetaria y fiscales expansivas que se siguieron, pero conforme el resto de países normalicen sus crecimientos, es lógico que esas políticas se empiecen a deshacer, que es lo que estamos viendo, y que el crecimiento de las economías comience a converger a sus tasas de crecimiento potencial.
¿También el Perú convergería a esa tasa de crecimiento potencial?
Sí, pero la diferencia con el resto del mundo es que los países han podido mantener sus tasas de crecimiento potencial y nosotros no, ha disminuido.
INFLACION
Otro problema este año ha sido la inflación, ¿seguirá alta en el 2022?
El BCR, creo de manera muy temprana, deshizo su política altamente expansiva a nivel de tasas de interés y también en lo cuantitativo, lo cual ayuda a que la inflación se modere. En el 2022 la comparación va a ser con precios altos de este año. Prevemos que los precios se mantendrán y crecerán un 3%, pero hay un aspecto negativo en esto de la inflación.
¿Cuál es?
Está aumentando es la inflación subyacente, todos los indicadores de esta variable están por encima del tope del rango meta (3%). Y eso significa que los agentes económicos ya tienen capacidad de presionar los precios, tanto las empresas como los consumidores. Y eso sí sería lo que realmente preocupa.
GABINETE
Se vocean nuevos cambios en el gabinete ministerial, se dice que saldrían varios ministros, pero, ¿cómo tendría que ser ese nuevo gabinete para influir positivamente en la economía?
Bueno, el presidente Castillo está en una situación política complicada porque cada vez pierde popularidad y más en los sectores que lo apoyaron para llegar a la presidencia. Entonces la capacidad que tiene su gobierno de hacer cualquier cambio en la política económica, hacia la derecha o hacia la izquierda, es muy limitada. Y el riesgo es que la oposición trate de vacarlo nuevamente.
¿Entonces, dice que el presidente ya no tiene margen de acción para hacer cambios?
Lo que el presidente Castillo sí podría hacer es una alianza con los sectores políticos que son más de centro y moderar un poco su política económica. Buscar un premier más afín a esos grupos en el Congreso y una política de consenso que posibilite que le aprueben ciertos cambios, y no le ocurra lo que pasó con el pedido de facultades legislativas, que prácticamente se las recortaron todas.
INVERSIÓN PRIVADA
¿Cree usted que bajo un escenario como el que señala, la inversión privada se recuperaría rápidamente?
No, no creo; el mensaje que hemos recibido de lo que pasó con Nexa, Las Bambas, en el tema de las negociaciones con la comunidad de Chumbivilcas, muestran que ninguna de las partes está dispuesta a negociar. Hay comunidades que están claramente empoderadas por el gobierno y a la mina le cuesta mucho cerrar la llave, pero una vez que la cierra ya no quiere abrirla hasta que las condiciones este más claras.
¿Tiene solución este problema de los conflictos mineros?
Yo sí pienso que hay que encontrar una nueva fórmula para sacar adelante los proyectos mineros en cartera y que no es una simple cuestión de protestas y mineros renuentes a producir; el problema de fondo es que las comunidades mineras no se están beneficiando de esa actividad y tiene que haber una negociación política detrás para alcanzar una solución. Se requiere el adelanto social que propusimos en el 2016 (cuando el partido PPK gano la elección)
Pero que medidas concretas se tendrían que tomar
Por ejemplo, no puede ser que el gobierno se demore tantos años en plasmar los proyectos sociales que se financian con el canon.
¿Entonces, usted no ve que la situación de alta incertidumbre política y económica que vive el país se vaya a resolver en el 2022?
No creo, cuesta pensar que el presidente Castillo se vaya a convertir en un gobernante promineros o pro-inversión privada. Y claramente los inversionistas, sobre todo mineros, programan sus decisiones para 5, 10, 15 años, Entonces, en un entorno en el que también está el tema de Chile (donde la Izquierda accedió al poder) y de Colombia (elecciones) ya los inversionistas están descontando que América Latina, incluido Perú, va a tener 5 años perdidos para invertir. Para convencerlos que regresen se necesita un shock de confianza muy importante y no veo que Perú lo pueda dar.
El próximo año se concluirá la inversión en Quellaveco y para adelante no vemos grandes proyectos de inversión. ¿Cuándo se sentirá el impacto en la economía de que ya no estén saliendo grandes proyectos mineros?
Yo diría que a finales del 2022 o inicios del 2023 ya vamos a empezar a sentir los efectos negativos de que no entren nuevos proyectos mineros. Y eso lo empezaremos a ver en la ejecución del presupuesto público. No hay que olvidar que los mayores ingresos públicos de este año han sido por los precios de los minerales y ese boom de ingresos ya no se va a repetir en el 2022, por lo que el MEF no tendrá tantos recursos para el gasto público. Además se va a desacelera el gasto privado, la inversión privada va estar deprimida.
¿El consumo privado también se desacelerará?
Si, el consumo crecerá, pero a una tasa menor (2.2%, Ver tabla). No hay que olvidar que el gobierno inyectó el 2021 casi 10 puntos del PBI a los consumidores a través de los retiros de las AFP y que los inversionistas tuvieron el programa de financiamiento Reactiva Perú, que fueron otros 9 puntos de producto, y este impulso ya no se va a repetir en el 2022. Entonces solo por estos efectos nosotros ya vemos una desaceleración de la economía en el 2022 y que se va a prolongar hasta el 2024.
CUENTAS FISCALES
En el tema fiscal, ¿comparte la idea del ministro de Economía que una muestra de que las finanzas públicas se están manejando bien es que el déficit fiscal será este año 3% del PBI?
En primer lugar, gran parte de la reducción del déficit fiscal viene por el boom de ingresos, no viene por un menor gasto. Y cuando esos ingresos se normalicen, porque eventualmente los precios internacionales de los minerales van a tener que converger a la tendencia histórica y la presión tributaria que hoy está alrededor del 16% del PBI vuelva al 14%, en ese momento se verá un déficit fiscal más alto.
El ministro también dijo que otra muestra de confianza en el manejo fiscal es haber colocado más de US$ 5,000 millones de deuda a una tasa de interés menor a la que paga Chile. ¿Es así?
Es cierto que en marzo de este año el Perú se endeudó a una tasa extraordinariamente baja, pero en octubre se volvió a emitir bonos y las tasas de interés fueron casi 100 puntos básicos más de lo que fueron en marzo. Entonces, es cierto que la emisión de bonos de marzo 2021 fue buena, pero la de octubre no fue tan buena.
El MEF no ha enviado el proyecto de ley para fijar las nuevas reglas fiscales que se suspendieron por la pandemia…
No lo han hecho por una razón sencilla, ellos no se quieren atar las manos. Además, la regla fiscal para este año se fijó por Decreto Supremo y no por ley, como hicimos en el 2016 con la ley de responsabilidad fiscal en el 2016, y esta ley debe durar los cinco años de gobierno porque no sólo pone límites al déficit fiscal y a la deuda pública sino al crecimiento del gasto público corriente sin incluir gastos de mantenimiento, y del gasto público no financiero.
Los objetivos económicos de las administraciones pasadas estaban claros, para después de la pandemia: reactivación y consolidación fiscal. ¿Este gobierno, está en esa senda?
Este gobierno está haciendo caso omiso a esa consolidación fiscal y lo que va a suceder es que más adelante algún ministro de economía va a tener que hacer un ajuste fiscal porque se va a quedar sin recursos y no le va a quedar otro camino que recortar el gasto.
¿Qué debería hacer entonces para evitar eso?
Tiene que haber una mayor disciplina de cómo se califican los ingresos. De los S/. 12,000 millones adicionales que previó el MEF por mayores ingresos tributarios, una parte se debieron guardar porque sabemos que son cíclicos. El Consejo Fiscal puede ayudar en esto y establecer cuáles son ingresos permanentes y cuáles transitorios. Además, hay gastos que se calificaron como transitorios por la pandemia y que se debieron revertir en términos reales y no se ha hecho; y lo tercero para una consolidación fiscal es aprobar una ley de responsabilidad fiscal para cinco años y mostrar ahí cual va a ser el déficit, cómo se va a financiar y cuál es el techo máximo de gasto que tendría el gobierno.
GESTION PÚBLICA
¿Qué podría hacer este gobierno para mejorar la gestión pública?
Hay que insistir en la necesidad de la meritocracia en el sector público. Mucho se ha hablado de la Ley servir, pero esta tenía muchas falencias. Tiene que haber una norma que abarque a todos y garantice una carrera pública y que los funcionarios públicos de carrera no cambien con cada gobierno. Eso requiere una ley consensuada en el Congreso.
PRECIOS
¿Qué opina de la tendencia de este gobierno a intervenir de alguna manera en la fijación de precios, por ejemplo, usando fondos de estabilización como el combustibles o franjas de precios?
Lo primero es que los medios de comunicación deberían pedir al gobierno transparencia en ese proceso. Por ejemplo, en el caso del GLP, se usó el FEPC, pero el mismo MEF en su momento había dicho que ese fondo tenía un faltante de cerca de S/ 8,000 millones. El Congreso debería pedir cuentas al ministro de Economía sobre cuanto esta gastando el fisco en todos esos subsidios. De otro lado cuando se anuncia un subsidio en las tarifas de electricidad, a costa de los que más consumen eso es un impuesto, no un subsidio.
En segundo lugar, no todos los productos pueden entrar a la franja de precios; y, por otro lado, se anuncia que se va a exonerar del IGV a la compra de fertilizantes, cuando se dijo que la pretendida reforma tributaria era para recaudar más, entonces en qué quedamos.
Ad portas de concluir el año, ¿cuál sería su mensaje en materia económica?
Estamos en un momento casi único en el país en el que tenemos todo lo que necesitamos para salir adelante: un entorno internacional muy favorable con precios altos; tenemos la capacidad de sacar adelante todos los proyectos mineros en cartera. Lo que se necesita es que la política nos acompañe, pero lamentablemente está yendo en contra, por lo que se necesita un mayor consenso político, un mayor diálogo en el Congreso para lograr ese consenso.