El último reporte de Thorne & Associates alertó “una posible materialización del deterioro de los activos del tesoro público” dado que “el proyecto de endeudamiento permite al gobierno reasignar su espacio de deuda de una moneda a otra, en caso las condiciones de mercado mejoraran”.
¿Qué significa el “deterioro de los activos del tesoro público”? En diálogo con Gestión, el exministro de Economía, Alfredo Thorne, detalló que el sector público consolidado tiene activos por -alrededor de- S/ 103,000 millones lo que está indicado en el Marco Macroeconómico Multianual (MMM).
“Sin embargo ese dinero no es del tesoro público sino de las distintas agencias de gobierno llámese Sunat, Sunass, empresas eléctricas estatales u otras que tienen su dinero depositado en distintas instituciones financieras (bancos) que suman S/ 103,000 millones. En principio el tesoro público no puede hacer uso de ello porque no pertenecen -valga la redundancia- al tesoro público. Ante ello, en la Ley de Endeudamiento que se ha presentado hay un articulado que dice que se incorporen todos esos saldos en la cuenta del tesoro público al 31 de diciembre de 2021 y que esos saldos deberían ser depositados en la cuenta del tesoro público a más tardar el 31 de marzo del 2022″, explicó.
“Hay otro articulado -además- que le permita al tesoro público usar esos saldos no solo para manejos de pasivos y activos en caso que haya problema de liquidez sino que se incorporen como fuente de financiamiento del tesoro público -es decir- para pagar las deudas y las amortizaciones”, agregó.
Añadió que aquellos recursos que tienen un destino específico como -por ejemplo- la reserva de la ONP para pago de pensiones, no se podría usar para ese propósito.
“Ese dinero utilizan las agencias del Estado como su cuenta corriente, si se quita todo el dinero dejan de operar. Nosotros pensamos que en lo mínimo podría llegar a 8%, es decir, se podría usar casi 5 puntos porcentuales con ese propósito. Esta es nuestra estimación”, precisó.
-Otras proyecciones-
El reporte también estima que la economía peruana crecerá este año en 10.7% y en 1.4% el 2022. “Si bien nuestra proyección de crecimiento para 2022 es menor al 4.8% del MEF, creemos que está en línea con el deterioro de las expectativas de los inversionistas, en un contexto de gran incertidumbre política”, especifica el reporte.
Al respecto, el economista dijo que a diferencia del BCR sus proyecciones se deben principalmente al deterioro del consumo e inversión privada.
“El BCR proyecta que la inversión privada va a llegar a 0% el 2022. Nosotros creemos que la inversión privada va caer en -9.4% el 2022 debido a que el componente más negativo en la expectativas empresariales es de Construcción, lo que nos dice que este sector no va a añadir tanto a la inversión privada como en el pasado y la segunda tiene que ver con el consumo privado”, afirmó.
El consumo privado -dijo- en el 2021 se recuperó producto de la liberación de los fondos de pensiones y la CTS que representaron casi el 10% del PBI. “Nosotros pensamos que el 2022 no va ver ese efecto”, subrayó.
Respecto al tipo de cambio, proyecta que se ubique en S/ 4.3 para fines del 2021 y en S/ 4.5 en 2022, con una depreciación de 13.3% y 4.9%, respectivamente.
Igualmente estima que junto al menor crecimiento económico y el mayor déficit fiscal, la deuda pública de 2021 y 2022 estarían 3.9 p.p. y 5 p.p. por encima de lo observado en 2020, respectivamente.