Una manera en que el estímulo fiscal empuja la inflación es reforzando la capacidad de gasto de hogares y empresas. (Reuters: Antara Foto / Hafidz Mubarak).
Una manera en que el estímulo fiscal empuja la inflación es reforzando la capacidad de gasto de hogares y empresas. (Reuters: Antara Foto / Hafidz Mubarak).

En la década del 2010, los bancos centrales emitieron enormes cantidades de dinero vía flexibilización cuantitativa (QE), mientras que los gobiernos aplicaron austeridad fiscal. En países ricos, la inflación estaba por debajo de las metas de sus bancos centrales. Luego llegó la pandemia y hubo más QE, pero la novedad fueron los estímulos fiscales por US$ 10.8 millones de millones implementados en todo el mundo, equivalentes al 10% del PBI global. El resultado fue una alta inflación.