Una de las respuestas de las entidades financieras a la crisis del covid-19 ha sido el mayor impulso a las soluciones digitales. Asimismo, sus clientes han aumentado fuertemente la utilización de canales digitales para realizar sus operaciones.
Para la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), si bien los desarrollos digitales en el sistema financiero son muy positivos, conllevan también riesgos operativos, de tecnología y ciberseguridad.
Ante ello, el regulador prepara una norma de ciberseguridad para enfrentar tales problemas, señaló Jorge Mogrovejo, superintendente adjunto de Banca y Microfinanzas de la SBS.
Crecimientos desmedidos en el marco de la transformación digital del sector financiero podrían exponer a los clientes o a las entidades del sector a eventuales pérdidas, advirtió.
Hoy, personas y empresas pueden abrir cuentas de ahorro online, realizar transferencias de dinero y pagos con el celular, y usar billeteras electrónicas, destacó la SBS. Muchos bancos ya venían aplicando estas soluciones, pero durante la pandemia han apurado sus planes, comentó Mogrovejo en un evento organizado por el IPE.
Mayor demanda
Estimó que el nuevo entorno del sector financiero generará aún mayor demanda por nuevos productos digitales y de autoservicio, incremento de las transacciones en medios digitales y de los pagos virtuales, aceleración de la transformación digital, subcontratación y procesos ágiles para desarrollar proyectos innovadores, mayor trabajo remoto y cambios en los hábitos de los usuarios.
Entre los riesgos que enfrentará la banca está el aumento de fraudes, como la suplantación de identidad (phishing), detalló. En los últimos meses crecieron los delitos cibernéticos, como robo de datos, fraudes y estafas por canales digitales, reveló la UIF.
Otro reto será el proceso de autenticación de la identidad del cliente en las operaciones. “Al ser más digital no se va a recurrir siempre al DNI físico en una ventanilla frente a una persona, va a haber otras formas de autenticación que nos den la misma seguridad”, dijo el funcionario.
Además, hay riesgos tecnológicos por migrar varios procesos de las entidades financieras al ámbito digital en un tiempo muy corto, afirmó. “Veremos un aumento de la exposición de las empresas del sistema financiero y de sus proveedores a posibles ciberataques”, agregó.
La regulación de la SBS sobre desarrollos digitales debe buscar mitigar los riesgos, pero al mismo tiempo facilitar el crecimiento, sostuvo.
Identidad
En agosto el regulador publicó un proyecto de reglamento para la gestión de la seguridad de la información y la ciberseguridad, que incluye a todas las empresas supervisadas. La propuesta busca mantener la seguridad en los servicios que se ofrezcan a los usuarios en el entorno de transformación digital.
Un ejemplo de por dónde irá la regulación de ciberseguridad es la exigencia de dos factores de autenticación de la identidad del cliente en la contratación de operaciones bancarias, de los cuales uno de ellos habrá de ser biométrico, dijo Mogrovejo.
Indicó que las entidades que adopten tecnología digital tendrán que invertir también en aparatos más sofisticados para mayor seguridad de los usuarios. Así, la biometría evitará la falsificación de firmas o un DNI falso, acotó.
EL DATO
- 48% de operaciones bancarias en abril se hizo por canales virtuales, porcentaje similar al de transacciones presenciales.