Los precios de los alimentos y del balón de gas, productos de suma importancia en la vida cotidiana de las familias peruanas, han experimentado un alza de carácter temporal en los últimos meses, debido a factores como el alza del dólar, la inflación a nivel internacional, entre otros.
Para hacer frente a este difícil contexto, existen herramientas tecnológicas al alcance de todos siempre que se disponga de un smartphone y conexión a internet.
Una de ellas es el aplicativo Mi Caserita, del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri). Esta app, disponible para equipos con sistema operativo iOS y Android, muestra el precio máximo y mínimo de diversos alimentos como el pollo, vegetales, legumbres y frutas en los principales mercados de Lima Metropolitana.
Otra app similar es Facilito, del Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin). En ella se puede conocer los precios de venta de los combustibles como la gasolina, diésel y el gas licuado de petróleo (GLP). El aplicativo muestra los valores máximos y mínimos en los estacionamientos de todo el país.
Recomendaciones frente a la inflación
Debido al complicado escenario, existen opciones desde el punto de vista de las finanzas personales que pueden ayudar a los peruanos a maximizar su dinero.
Según Jorge Carrillo Acosta, profesor de Pacífico Business School, una primera recomendación es la elaboración de presupuesto familiar que permita tener claro los ingresos con los que se cuenta y los gastos a realizar para priorizar todo aquello que se considere relevante.
El experto en finanzas también sugiere que se podrían realizar compras junto a otros vecinos de un mismo barrio, ya que al adquirir productos en grandes cantidades se puede obtener descuentos significativos.
Otra de las alternativas es el reemplazo de algunos productos alimenticios por otros de similar valor nutricional, así como la apuesta por marcas menos conocidas pero que ofrecen precios menores a las empresas tradicionales.
¿Qué medidas podría tomar el Gobierno?
Si bien el Ejecutivo ha aclarado que la aceleración de la inflación será temporal, existen algunas opciones que podría manejar el gobierno de Pedro Castillo a fin de atenuar el impacto del alza de los alimentos y los combustibles.
Una de ellas sería la inclusión temporal de la gasolina al Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles (FEPC), a fin de subsidiar parcialmente el alza internacional de este producto. Esta medida aún está siendo evaluada desde el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) pero ya ha sido aprobada por el Ministerio de Energía y Minas (Minem).
Según Luis Miguel Castilla, director de Videnza Consultores, también se debe mantener la medida tomada por el Indecopi de mantener informada activamente a la población sobre las variaciones de los precios de los alimentos, así como un trabajo constante de fiscalización.
“El precio de la leche de tarro se ha mantenido, no se ha movido en los últimos años. Si hay desviaciones es porque quizás están tratando de mantener márgenes de ganancias quienes distribuyen este producto. Por ende, el trabajo de Indecopi es el de desalentar el acaparamiento. Tiende a ser disuasivo”, comenta.
Tanto Castilla como Carrillo coinciden en que el anunciado Bono 350 podría no llegar a ser un paliativo frente a la inflación si es que no se encuentra lo suficientemente focalizado o se convierte en una medida por la que se opte de forma constante.
El director de Videnza refiere que también se debe evitar aplicar controles de precios, ya que una medida de este tipo podría convertirse a futuro en un tema difícil de regular y que brindaría mayor inestabilidad e incertidumbre política.
“Se debe evitar a toda costa controles de precios porque eso distorsiona el mercado. Eso lo que hace es ocasionar desarrollo de mercados negros o paralelos. No solo tiene un efecto económico sino que legalmente hay una imposibilidad. Lo tiene que aprobar el Congreso”, puntualiza.