Los mercados de materias primas de China cayeron este miércoles, liderados por fuertes desplomes en los precios del carbón térmico después de que el planificador estatal dijo que evalúa una intervención para enfriar los precios récord de un combustible vital para la segunda mayor economía mundial.
El descenso en China tuvo un efecto dominó en los mercados mundiales, donde los precios de metales básicos usados en la manufactura y la construcción, como el cobre, el aluminio y el zinc, también cedieron. El precio del crudo de referencia también bajaba.
No obstante, los precios mundiales de las materias primas siguen siendo elevados, así que cualquier descenso sólo dará un respiro temporal a unos bancos centrales preocupados por la inflación, mientras China y otras economías importantes absorben combustible y otras materias primas en medio de un repunte desde la recesión inducida por la pandemia.
El planificador estatal chino, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR), dijo el martes que está estudiando formas de intervenir en los altos precios del carbón y que tomará todas las medidas necesarias para llevarlos a un rango razonable, después de convocar una reunión de las empresas de carbón clave y la asociación de la industria.
El carbón es un indicador líder de la actividad económica china, ya que se utiliza para alimentar alrededor del 60% de las centrales eléctricas de China, que han tenido problemas para mantenerse al día con la demanda energética. Algunas casas y fábricas solo reciben un suministro intermitente.
Los futuros del carbón térmico en China cayeron desde los máximos históricos del martes, alcanzando un límite por debajo de 8%, a 1,755.40 yuanes (US$ 274.71) por tonelada.
Los futuros del aluminio y el zinc en China cayeron más de 6%, mientras que productos petroquímicos como el metanol y el etilenglicol y la urea, que usa carbón como materia prima, declinaron entre un 8% y 9%.
Un carbón más barato y una mayor oferta podrían aliviar la inflación en las fábricas de China, que alcanzó máximos históricos en septiembre debido a la escasez energética y al alza de los precios de las materias primas.
“La intervención oficial por fin ha rociado un poco de agua fría a los ardientes precios de la energía. Sin embargo, los controles de precios locales sólo llegan hasta cierto punto”, señaló Frederic Neumann, del HSBC.
“El meollo del asunto es la escasez mundial de suministros energéticos a medida que el hemisferio norte se acerca al invierno. Incluso con una guía de precios más contundente para ciertos productores, pueden pasar varios meses más antes de que se restablezca el equilibrio fundamental de la oferta y la demanda mundial”, agregó.
Pekín ha intentado abordar también la oferta, ordenando a sus dos principales regiones carboníferas que aumenten la producción y aprobando nuevos proyectos mineros.
Algunos importantes productores se han comprometido a limitar los precios del carbón térmico este invierno y la próxima primavera, mientras que la administración de energía china instó a las empresas de redes eléctricas a maximizar las compras desde fuentes renovables.