El centro comercial Polvos Rosados, ubicado en Santiago de Surco, tampoco atraviesa su mejor momento en esta crisis generada por el COVID-19, y no se debe al comercio ambulatorio tal y como sucede con otros conglomerados de la capital.
Rosa Mercedes Cucho, presidenta de la Asociación de Comerciantes de Polvos Rosados -que agrupa a 189 comerciantes - indicó a Gestión.pe que cuando reiniciaron actividades, el pasado 30 de junio, se observó una importante llegada del público.
Así, en el mes de julio se reportó un desempeño favorable en cuanto a la clientela y ventas, pero la caída empezó en agosto. De este modo, a dos meses de haber reiniciado actividades, la situación dio un giro importante.
La dirigente explica que dicha situación responde a que cuando se reabrió el establecimiento bajo los protocolos del Ministerio de Salud (Minsa), el público llegó al lugar a comprar los productos que necesitaban en ese momento, tales como cargadores de celulares, medias para en invierno y ropas interiores. Pero, además, esa compra se realizó con miras a tener de reserva para los próximos meses.
“Los clientes han hecho sus compras como para no venir mucho al local. Por ejemplo, si tienen que comprar algo que necesitan, lo compran para dos o tres meses, depende de lo que usen”, sostuvo.
Explicó que esa única compra realizada por el cliente se debió ante el temor de contagiarse por el coronavirus en el camino al centro comercial o dentro de ella.
Precisó, además, que el comercio ambulatorio no se registra al rededor de la zona, debido a las fiscalizaciones constantes de la Municipalidad.
Mantener ventas
Cucho indica que como el cliente realiza su compra y cuando se le acaba (productos de consumo) o requiere nuevos recién regresa, se genera un ambiente de inestabilidad en el comercio.“Entonces no sabemos en qué momento va a volver (el cliente)”, comentó.
De tal forma, dijo que si bien no hay llegada de público, lo que se busca es mantener las ventas y para ello, los comerciantes se han preparado para esta nueva normalidad. Aquellos que tienen su propia cartera de clientes ya saben qué productos son los más demandados y se hacen los esfuerzos por conseguirlos.
“A veces nos piden tres o cuatro productos y compran para guardar. No salen los adultos mayores y por eso solo sale su familiar a comprar, esa es la razón por la que también no hay llega del público. (...) Entonces, como nos conocen, nos llaman y vienen a recoger su producto”, apuntó, para luego indicar que también se ha reforzado la ventas a través de su marketplace.
Finalmente, dijo que conociendo el nuevo patrón de consumo de los clientes, se espera que la próxima compra que realizarán será para campaña de primavera (a finales del mes de setiembre).