La fruta amazónica pitahaya podrá ser cultivada en las alturas de la sierra, gracias a la aclimatación logrado tras una investigación de la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga de Ayacucho. Con ello, pasará a convertirse en una nueva opción productiva para los agricultores de los valles interandinos.
Así lo demuestra el proyecto de investigación “Evaluación de la aclimatación del cultivo de la pitahaya en las condiciones agroecológicas del Centro Experimental Wayllapampa”, a cargo del tesista Hever García Cayampi, de la Escuela Profesional de Agronomía, de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga, según informó la agencia Andina.
“El cultivo se está aclimatando y dando frutos en los valles interandinos, a una altura de 2,500 metros sobre el nivel del mar. Muchas de las plantas han alcanzado una altura de 1.5 metros y notamos un crecimiento vigoroso”, afirmó.
Un nuevo objetivo es calcular el costo de producción de la pitahaya en los valles interandinos de la región Ayacucho, según indicó.
La pitahaya se cultiva actualmente en departamentos de la selva como Amazonas y San Martín, aunque se ha introducido con éxito en otras regiones del país como Piura, Lambayeque y Junín (provincia de Chanchamayo).
A la par con su probada adaptación a diferentes condiciones agroecológicas de la selva y ahora en la sierra, la pitahaya es un fruto considerado un prodigioso superalimento gracias a sus importantes propiedades nutricionales que favorecen el buen funcionamiento del organismo y fortalecen el sistema inmune frente a diversas enfermedades.
Conocida por los llamativos colores amarillo o rojiza de su cáscara, la pitahaya tiene forma ovalada y su cáscara presenta protuberancias con puntas de color verde y amarillo, por lo que se le conoce también como la “fruta del dragón”. Su tamaño va desde los 8 hasta los 12 centímetros de largo y su peso varía de 150 a 450 gramos.
Su pulpa es blanquecina o fucsia con numerosas y pequeñas semillas negras que, en conjunto, brindan un sabor dulce y cítrico muy refrescante.
Propiedades nutritivas
Se trata de un fruto que tiene muy bajo aporte calórico, por su baja concentración de carbohidratos, pero tiene un alto contenido de vitamina C, ideal para prevenir enfermedades respiratorias como la gripe y los resfriados, además de mejorar la absorción del hierro de los alimentos por lo que ayuda a combatir la anemia.
Contiene minerales como el calcio, hierro y fósforo. Asimismo, es una gran fuente de antioxidantes y vitaminas del complejo B como la Tiamina (B1), Riboflavina (B2) y Niacina (B3), que son vitales para la producción de glóbulos rojos.
Su consumo regular reduce la proliferación de radicales libres en nuestro organismo, que son los responsables de la aparición de tumores cancerígenos y otras enfermedades graves. Además, estos nutrientes son muy importantes en el periodo de crecimiento, embarazo, lactancia materna, actividad física intensa y para sobrellevar tratamientos oncológicos.
Otra importante propiedad de la pitahaya es que protege al hígado impidiendo que lo dañen diversos tipos de toxinas. Asimismo, sus semillas son ricas en Omega 3, ideal para combatir algunas enfermedades autoinmunes y prevenir la aparición de ciertos tipos de cáncer relacionados con los cambios hormonales, como el de mama, colon y próstata.
La pitahaya se consume al natural, en jugos, cócteles y se emplea en decoraciones gastronómicas por su gran atractivo visual. Por su gran versatilidad se utiliza como insumo de helados, yogur, mermeladas, postres, gelatinas y refrescos.