
Desde este 3 de mayo del 2025, el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre la Alianza del Pacífico y Singapur ya está en plena ejecución para Perú, Chile y Singapur, países que culminaron sus procesos internos para oficializar este acuerdo. Colombia y México aún están en etapa de ratificación.
La ministra de Comercio Exterior y Turismo, Desilú León Chempén, destacó que este acuerdo marca un paso más en la consolidación de la Alianza del Pacífico como una plataforma económica con visión global, con énfasis en la conexión con mercados asiáticos. Además, subrayó el potencial del tratado para mejorar las condiciones de acceso a productos y servicios en los países miembros.
¿Qué implica este TLC?
Este pacto representaría una oportunidad para fortalecer la presencia de las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYME) peruanas en cadenas de suministro regionales y globales, especialmente en el corredor Asia-Pacífico.
Así, la acumulación de origen permitirá que productos con insumos procedentes de distintos países del bloque sean considerados como originarios, abriendo la puerta a nuevas formas de cooperación comercial.
Otro de los aspectos resaltantes del acuerdo es su enfoque en áreas emergentes como el comercio digital y los servicios transfronterizos, lo que facilitará a las empresas peruanas ofrecer soluciones logísticas integradas, acceder a servicios tecnológicos y ampliar sus oportunidades de cooperación internacional.
“Esta alianza abre puertas en sectores estratégicos para nuestro desarrollo, como la tecnología, la digitalización y la innovación empresarial. Es una vía para reforzar el posicionamiento del Perú en los mercados de alto valor”, afirmó la ministra.
Este avance complementa el historial de relaciones comerciales con Singapur, país con el que Perú mantiene un tratado bilateral desde agosto de 2009 y también comparte vínculos en el marco del Acuerdo Transpacífico (CPTPP), en vigor desde septiembre de 2021.
Relación comercial Perú–Singapur en cifras
En 2024, el comercio bilateral entre Perú y Singapur alcanzó los US$ 100 millones. Las exportaciones peruanas sumaron US$ 22 millones, destacando minerales y productos agrícolas. Por su parte, las importaciones desde Singapur ascendieron a US$ 78 millones, centradas principalmente en químicos nutricionales, lubricantes y plásticos.