Hoy en día, en un contexto internacional menos desfavorable, pero una situación interna dura, con conflictos sociales que golpearon el inicio del 2023, el ciclón Yaku, el fenómeno de El Niño costero (al que se agregará un próximo El Niño global), ingresos reales que no se recuperan, un empleo caracterizado por puestos de trabajo precarios, entre otros, nos llevarían a un crecimiento económico más cercano al 1%.
En la reciente Encuesta de Expectativas Macroeconómicas del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), la expectativa de los analistas económicos es que el PBI crezca solo 1.2%. Este porcentaje es menor a lo esperado en la encuesta de junio (1.8%).
Aunque se espera un mejor segundo semestre, tras una primera mitad del año en negativo, no será suficiente para despegar este año.
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De hecho, si el PBI creciera acorde a las expectativas de los analistas, nos acercaríamos al resultado del 2009, cuando la economía peruana se incrementó solo 1.1%, de acuerdo con data del BCRP.
Ese año, el contexto mundial golpeó duramente: la crisis de 2008-2009 comenzó como una crisis financiera, luego se transformó en una crisis económica que afectó al mundo, y por supuesto, al Perú.
Algo más optimistas es el grupo del sistema financiero en la encuesta de julio. Las expectativas de este grupo es una expansión del PBI del Perú de 1.4% para este año. Sin embargo, en el reporte de junio esperaban una expansión de 1.8%.
Recordemos algunas cifras en detalle. Macroconsult proyecta un incremento de la economía nacional de 1% para este año y Thorne & Associates espera una expansión de solo 0.8%.
En tanto, la previsión de crecimiento para el 2023 del BBVA Research es 1.6%, “pero la sorpresa negativa en el segundo trimestre refuerza el sesgo bajista que esta proyección tiene”.
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Si bien habría crecimiento económico este año, una expansión apenas por encima de 1% no es suficiente para una economía como Perú. En su momento, el exministro de Economía y Finanzas, Kurt Burneo, detalló que el país debería crecer 5% anual para absorber al mercado laboral a 300,000 jóvenes.
Además, será más difícil que la pobreza se reduzca. En un supuesto donde la economía peruana crecería a 1.7% este año, Macroconsult proyectó que la pobreza afectaría al 28.4% de la población, un incremento desde 27.5% en el 2022. Con un incremento económico más cercano a 1%, la cifra de pobreza seguramente será actualizada al alza.
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El impacto en la población
Las expectativas empresariales no “caminan” muy alejadas de estos estimados. Según la encuesta de expectativas macroeconómicas del BCRP, hay pesimismo para la economía a tres meses (45 puntos, es decir, tramo negativo). De hecho, desde hace 28 meses se mantiene por debajo de 50 puntos.
¿Esto cómo impacta en las personas o familias? Con un contexto para el corto plazo tan negativo, las intenciones de contratar o invertir se mantienen deterioradas.
