Parafraseando a Robert Peston, editor de economía de la BBC, a le pasa esto: No pueden pagar sus deudas porque gastaron y se prestaron demasiado dinero, y porque sus acreedores, el FMI y el resto de la eurozona no le prestarán más. Así, Grecia va incumpliendo acuerdos de pago de deuda con estos acreedores y se encamina potencialmente a la salida de la Unión Europea – Grexit.

¿Todavía no entiendes? Aquí, algunas claves para conocer más sobre la delicada situación que enfrenta Grecia, que afectaría irremediablemente a toda la eurozona, el mercado de capitales y hasta la Bolsa de Valores de Lima.

OrigenGrecia está en crisis porque tiene una deuda que simplemente no puede pagar. El país griego debe aproximadamente 323,000 millones de euros (US$ 358,000 millones) a sus acreedores, entre los que se encuentra en Fondo Monetario Internacioal (FMI), el Banco Central Europeo (BCE), países de la Eurozona, entre otros.

Durante años, antes que Grecia entrara a la Unión Europea en el 2001, el país estuvo gastando más dinero del que producía y ese gasto, elevadísimo en comparación con sus pares de la región, eran financiando a través de préstamos.

Muchos creyeron que la entrada de Grecia a la UE iba a significar un rescate financiero, pero esto no ocurrió. Es más, al complicado panorama, se sumaron problemas internos de corrupción y evasión fiscal, con un alto gasto público y un déficit fiscal superior al 3%.

RescatesEl primero rescate a Grecia llegó en mayo de 2010, cuando la Unión Europea y el FMI pusieron a disposición del gobierno griego 110,000 millones de euros (US$ 120,000 millones) para que cumpliera con sus compromisos de pago a sus entonces acreedores, en su mayoría bancos privados.

Para el segundo rescate, elevó la cifra total a 240,000 millones de euros. Los países europeos y el Fondo entregaban más dinero a Grecia con la condición de que aplique una serie de medidas drásticas de austeridad como recortes del gasto público, mayores impuestos y reformas al sistema de pensiones y al mercado laboral.

Estas medidas, aunque los organismos internacionales consideraban necesarios, golpearon duramente al pueblo griego, elevando la tasa de desempleo (en un momento, llegó a 60% en la población joven). Y ya son millones los ciudadanos griegos que están viviendo bajo la línea de pobreza.

Se estima que la economía griega se ha reducido en un 25% desde el inicio de los programas de austeridad, lo que ha acentuado su dependencia en créditos externos.

[Etiqueta]

NegociacionesDesde la llegada de Alexis Tsipras al poder, con un fuerte discurso anti-austeridad, ha marcado unna nueva etapa en las negociaciones: ahora se discute la reestructuración de la deuda griega, cuánto pagará, cómo pagará y bajo qué reglas y plazos. El tercer paquete de ayuda económica, si es que se llega a concretar, se estima en unos 29,100 millones de euros adicionales.

Hasta el momento, han habido innumerables reuniones entre el FMI, las autoridades griegas, las autoridades de la Unión Europea y el BCE, todas infructíferas.

¿En qué ha cedido Grecia? Pues ha propuesto a sus acreedores aplicar medidas como incrementos a impuestos al consumidor y a empresas que recaudarían US$ 9,000 millones. Sin embargo, afirma que no puede aplicar más medidas de austeridad que perjudiquen a empleados públicos y pensionistas, entre otros segmentos vulnerables de la población griega.

El gobierno griego propuso un acuerdo a dos años con el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) para cubrir plenamente sus necesidades financieras y con una reestructuración paralela de la deuda, que fue rechazado por unanimidad de los ministros de Finanzas de los otros 18 países que comparten el euro.

Los puntos más delicados siguen siendo las pensiones, los impuestos y la financiación. Funcionarios de la UE dijeron que el Gobierno de Tsipras debe ofrecer ahorros alternativos y medidas impositivas que reemplacen los recortes a las jubilaciones y aumentos de impuestos propuestos que él rechaza para tener un superávit fiscal modesto ante el pago de intereses.

La entrada en defaultAnte las numerosas reuniones sin ninguna decisión final, Grecia llegó al 30 de junio sin pagar al FMI la primera parte de una deuda de 1,600 millones de euros (US$ 1,780 millones). Así, el país cayó en cesación de pagos ante el organismo multilateral de crédito.

Un día después, el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) ha declarado que Grecia se encuentra oficialmente en default.

Con el vencimiento del plazo del segundo programa de rescate para Grecia, los fondos no utilizados ya no son accesibles y quedan congelados.

Los bancos griegos estarán cerrados por una semana, hasta el 6 de julio, y ya se establecieron límites a los retiros de cajeros automáticos. Las transacciones electrónicas están permitidas dentro del país, pero las internacionales están prohibidas.

El gobierno de Alexis Tsipras había anunciado que dejaría la decisión final en manos de la ciudadanía, para lo que convocó a un referendo.

ReferendoLos griegos votarán este domingo 05 de julio si quieren o no el plan de ayuda financiera de la Unión Europea y el FMI (el bailout), que conlleva recortes.

Ya se conocen las palabras exactas que aparecerán en papeleta del referendo:

"¿Debería ser aceptado el plan de acuerdo que fue presentado por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional ante el Eurogrupo el 25.06.2015 y que se compone de dos partes, que constituyen su propuesta unificada?

El primer documento se titula "Reforms for the completion of the current programme and beyond" ("Reformas para el término del programa actual y más allá") y el segundo "Preliminary debt sustainability analysis" ("Análisis preliminar de la sustentabilidad de la deuda")".

Las posibilidades son: "No se acepta/No" o "Se acepta/Sí"

Las encuestas ven empate entre "sí" y "no" en el referendo y el gobierno griego podrá tomar oficialmente una decisión luego de los resultados. El presidente Alexis Tsipras y el ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, llamaron a votar por el No pues todavía creen que se llegará a un acuerdo alternativo, mientras que el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, pide a los ciudadanos que voten por el SI.

GrexitSegún los analistas, la salida de Grecia de la Eurozona socavaría la confianza de los inversores pues afectaría en primer lugar la banca de los países periféricos y haría disparar los costes de financiación de los países miembros más endeudados. Los escenarios más pesimistas dibujan una crisis económica profunda en toda la Unión Europea.