Reciclar material de litio proveniente de baterías de vehículos eléctricos usadas promete ser aún más rentable que extraer ese metal cada vez más valioso, según un productor australiano que está construyendo una planta de ensayo en Canadá.
Neometals Ltd., con sede en Perth, trabaja en la recuperación de materias primas como litio, cobalto, níquel y cobre de baterías vencidas en una planta en Montreal. Se propone sumar lo obtenido mediante el reciclaje a su producción existente proveniente de la extracción.
La revolución de los vehículos eléctricos generó un aumento en la demanda de materiales para baterías, lo cual hizo subir los precios y desató una carrera por conseguir nuevas fuentes de abastecimiento.
Dado que los costos en alza y una mayor competitividad presionan los márgenes de la explotación minera, reciclar el metal de las baterías usadas va camino de convertirse en un recurso cada vez más importante, estimulado por normas gubernamentales que se proponen mantenerlas lejos de los vertederos, según Bloomberg New Energy Finance.
“En la planta piloto esperamos probar que mejora verdaderamente el margen neto”, dijo el director de operaciones Mike Tamlin en una entrevista telefónica. “Las cifras son mucho mejores que si se lleva a cabo la extracción primaria de un mineral”.
“Es imprescindible que el mundo recicle para que las baterías no nos ahoguen, y además tiene el potencial de producir componentes a un costo más bajo”, dijo Tamlin este jueves. “Al mismo tiempo, siempre vamos a necesitar que ingresen nuevos materiales”. Neometals es socia en la mina de litio australiana Mt. Marion y tiene otros dos proyectos de desarrollo en ese país.
Aumento de precios
American Manganese Inc., que está desarrollando el desmontaje automatizado de baterías, pronostica que la reserva de baterías de ion de litio usadas crecerá más del triple en los 10 años hasta 2025 y ha informado acerca de un trabajo de prueba que extrajo 100% del litio y el cobalto de los polvos de cátodo de las baterías.
La empresa china Tianqi Lithium Corp., que construye en la actualidad la planta de procesamiento de litio más grande del mundo, contempla llevar a cabo trabajo de investigación y desarrollo para reciclaje, dijo Phil Thick, el gerente general de la unidad australiana de la compañía productora, en una entrevista el lunes.
Neometals podría no tomar la decisión de invertir en la construcción de una planta de reciclaje hasta 2019, en tanto probar y refinar el proceso requiere más trabajo. “Fabricar la batería implicó revolver una serie de elementos”, dijo Tamlin. “Retornarlos a su estado original exige mucho trabajo, necesitamos una buena solución química y eso es lo que estamos desarrollando”.