El Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) dio un paso más en sus esfuerzos por enfrentar la informalidad laboral. A través de la Resolución Ministerial N° 000091-2025-TR, aprobó oficialmente el documento “Tipologías de la Informalidad Laboral”.
Este instrumento técnico tiene como objetivo principal clasificar de manera estructurada a los trabajadores informales en todo el país. Al reconocer la diversidad de situaciones dentro del empleo informal, el MTPE busca contar con una base más precisa para diseñar, implementar y evaluar políticas públicas que promuevan la transición hacia la formalidad.
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Las tipologías dividen a los trabajadores informales en dos grandes segmentos: grupos de autoempleados y grupos de trabajadores dependientes informales. Esta segmentación se basa en criterios como el tamaño de la unidad productiva, la naturaleza de la ocupación, el nivel educativo y el marco regulatorio sectorial.
Entre los autoempleados, el documento identifica categorías como:
- Autoempleado agropecuario (2.5 millones de personas)
- Autoempleado de servicios personales (620 mil)
- Autoempleado vendedor en establecimiento fijo (480 mil)
- Autoempleado de servicios de transporte (370 mil)
En el caso de los trabajadores dependientes informales, se incluyen tipologías como:
- Trabajador informal en emprendimientos (2.1 millones)
- Trabajador informal en unidades productivas de actividades extractivas (1.6 millones)
- Trabajador informal en empresas en crecimiento (484 mil)
Estas clasificaciones buscan capturar la heterogeneidad de condiciones dentro del sector informal, lo que permitirá definir estrategias diferenciadas por segmento.
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Publicación y actualización permanente
El documento y su anexo fueron publicados en la sede digital del MTPE. La revisión y actualización de estas tipologías quedará a cargo de las direcciones generales competentes del ministerio, tomando como base la información contenida en el “Registro de Trabajadores en la Informalidad Laboral”.
Las propuestas de modificación deberán ser validadas por el Viceministerio correspondiente y aprobadas por la Secretaría General, a fin de mantener la pertinencia del instrumento en el tiempo.
Un marco alineado con políticas nacionales e internacionales
La iniciativa se alinea con lo establecido por los artículos 23, 58 y 59 de la Constitución Política del Perú, así como con marcos estratégicos como la Política Nacional de Empleo Decente, el Plan Nacional de Competitividad y Productividad 2024-2030, y la Hoja de Ruta de Lima para la Transición a Economías Formales y Globales (2025-2040).
Todos estos instrumentos coinciden en la necesidad de reducir el empleo informal, garantizar derechos laborales y promover un crecimiento económico más inclusivo.
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