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El COVID-19 también está generando un impacto en la operatividad del Metropolitano. José Díaz León, gerente general de Lima Bus (uno de los cuatro operadores del servicio) explicó que la pandemia generó que los ingresos por concepto de pasajes bajen drásticamente y representen apenas el 20% de lo que ganaban hasta antes de la pandemia.
Esta situación generó -a su vez- que se active la figura de ‘compensación’ similar a un subsidio que otorga el Estado.
“Prestar el servicio en las actuales circunstancias, en primer lugar es anti económico toda vez que los ingresos provenientes de los pasajes de los usuarios representan apenas el 20% de los ingresos que teníamos hasta antes de la pandemia, tomando en cuenta que no percibimos subsidio del Estado, al asumir (los operadores) el riesgo de la demanda”, explicó a Gestión.pe.
Agregó que están ganando menos por acatar las restricciones impuestas por el Gobierno para evitar la propagación del COVID-19.
“Primero se dispuso que circulen el 50% de la flota -que implica 150 buses- luego se ordenó la salida de toda la flota (300 buses), pero que únicamente se use el 15% de su capacidad. Para que tenga una idea: un bus articulado de 18 metros de largo que lleva 160 pasajeros, actualmente está transportando 24 pasajeros lo que genera un desequilibrio económico"
Ante ello, anotó que el contrato de concesión del Metropolitano establece que durante una emergencia -como la que vive el país por el avance del coronavirus- el Estado asume a través del concedente, que es Protransporte, las diferencias que permitan tener un equilibrio económico para la continuidad del servicio.
“Lo que implica que si únicamente se generan 20% de ingresos, el 80% restante es la compensación que asume Protransporte y que está sujeta al servicio. Es decir si se programa el uso de menos flota, la compensación o subsidio de parte del Estado será menor”, explicó.
En ese sentido, el operador del Metropolitano comentó que el servicio está operando con el 90% de la flota que implica 270 buses articulados en horas puntas.
“Este desequilibrio fue cubierto por el Estado hasta la última semana de abril. No obstante, específicamente a partir del 27 de abril hasta la fecha no se recibe esta compensación para el equilibrio operativo que quiere decir para ser usado en el sostenimiento de la operación”.
¿De cuánto es la compensación? Díaz explicó que por semana es de aproximadamente S/ 2.5 millones.
Sobre esta demanda, desde Protransporte se indicó que “a fin de garantizar la continuidad del servicio” efectivamente se obtuvo más de S/ 14 millones provenientes del fondo de contingencia para ser usados como compensación -en virtud del contrato de concesión- las que serían directamente transferidos a los recursos de la Municipalidad Metropolitana de Lima.
¿A qué se debe el retraso? Básicamente por trámites burocráticos. Así lo explica Protransporte, que responsabiliza al Ministerio de Economía y Finanzas de no autorizarlo.
- De acuerdo con los procedimientos de ley se realizaron los trámites correspondientes para que el Concejo Metropolitano aprobara la transferencia del dinero desde la Municipalidad de Lima a Protransporte, acto que se concretó en sesión extraordinaria del 29 de mayo.
- Con fecha 2 de junio, luego de la notificación del acuerdo de Concejo Municipal, se emitió la resolución de incorporación de los fondos al presupuesto de Protransporte y el 4 de junio, mediante carta orden N° 20000041, se solicitó al Banco de la Nación la transferencia de dichos fondos a las cuentas correspondientes.
- No obstante, ello no se ha producido debido a que la Dirección General del Tesoro Público del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) aún no ha emitido la autorización correspondiente.
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-Los efectos-
¿Qué pasará si esta situación se extiende? Díaz aclaró que el servicio del Metropolitano se va a mantener, no obstante el retraso en el subsidio generará que a partir del lunes 15 de junio no operé toda la flota de buses (270) por el contrario podría reducirse a la mitad.
“Esta situación, si persiste podría generar problemas de orden laboral, aplicando la suspensión perfecta para un grupo de operarios ante la falta de recursos. En este servicio laboran 550 personas por empresas, lo que en total suman 2,250 personas. Estamos hablando de empleos totalmente formales”, subrayó.
Otro problema que preocupa al operador del Metropolitano es la falta de garantía de que este retraso sea una práctica continúa tomando en cuenta que el estado de emergencia se ha prolongado hasta el 7 de setiembre.
“Lo que transfirió el Gobierno para este fin cubría solo hasta finales de mayo; por lo que los meses de junio, julio, agosto y setiembre no sabemos lo que va a pasar. Si ya se sabe que el estado de emergencia va a durar hasta setiembre, el Gobierno tiene que comprometerse hasta esa fecha a que los recursos están garantizados para este fin (compensación) ya que si no hay, la incertidumbre continuará hasta setiembre”, puntualizó.
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