Las salidas a bolsa de empresas de todo el mundo recaudaron en el 2021 una histórica cifra total de US$ 594,000 millones subidas a la ola de unos eufóricos mercados alcistas, si bien su posterior desempeño bursátil a menudo acabó decepcionando a los inversores.
Desde ‘start-ups’ tecnológicas hasta empresas de “cheque en blanco” o de propósito adquisitivo especial (SPAC, por sus siglas en inglés) inundaron el mercado con ofertas de acciones, aprovechando la disposición de los inversores a hacer apuestas especulativas, ya que los bajos tipos de interés y la reapertura de las economías con las vacunas de COVID-19 alimentaron su apetito por el riesgo.
“Ha sido un mercado de capitales verdaderamente eufórico si se sitúan en el contexto de la actividad de nuevas emisiones y, en particular, de la creación de nuevas empresas cotizadas”, afirmó Andrew Wetenhall, codirector de mercados de capitales de renta variable para las Américas de Morgan Stanley. Algunas de esas apuestas funcionaron.
Los que en enero acudieron a la salida a bolsa por US$ 1,200 millones de la empresa de préstamos Affirm Holdings Inc, respaldada por PayPal Holdings Inc, han duplicado con creces su inversión, frente a la rentabilidad de 25% del índice S&P 500.
Pero muchos otros casos se han agriado tras el debut. Las acciones del fabricante sueco de leche vegana Oatly Group AB, que recaudó US$ 1,400 millones en su salida a bolsa en Nueva York en mayo, han bajado un 53%, mientras que las de la empresa británica de reparto de comida Deliveroo Plc , que recaudó 1,500 millones de libras (US$ 2,100 millones) en su estreno en Londres en marzo, han bajado un 46%.
El índice Renaissance IPO, que sigue la evolución media de las nuevas salidas a bolsa en Estados Unidos, ha bajado alrededor de un 8% en el año, en comparación con la subida de 25% del índice S&P 500.
Algunos banqueros advirtieron que las acciones de algunas de las empresas que salieron a bolsa en el 2021 siguen cotizando a valoraciones históricamente altas, aunque sufrieran un golpe tras su salida a bolsa.
Esto se debe a que muchos inversores estuvieron dispuestos a pagar mucho por estas empresas en rondas de recaudación de fondos privados en el período previo a sus debuts bursátiles.
“El problema es que los compradores de estas salidas a bolsa, así como quienes compraron acciones tras la cotización inicial, están registrando pérdidas”, dijo Paul Abrahimzadeh, codirector de mercados de capital para Norteamérica en Citigroup.
Un total de 2,097 salidas a bolsa, excluyendo las de las SPAC, recaudaron US$ 402,000 millones en el 2021 en todo el mundo, según el proveedor de datos Refinitiv. Esto supuso un aumento de 81% en la recaudación y un incremento de 51% en el número de salidas a bolsa del 2020.
Incluyendo las SPAC, que son una suerte de “cascarones” de empresas que normalmente comienzan su actividad cuando han conseguido inversores, los ingresos de las salidas a bolsa en el 2021 alcanzaron los US$ 594,000 millones, según el proveedor de datos Dealogic.
Los principales sectores que impulsaron los grandes volúmenes de debuts bursátiles fueron el tecnológico y el de la salud. Este año salieron a bolsa 426 empresas tecnológicas y 332 relacionadas con el sector de la salud, que en conjunto representan casi el 42% de los ingresos totales de las salidas a bolsa en todo el mundo durante el año, según Refinitiv.
Entre las mayores salidas del 2021 se encuentra la del fabricante de vehículos eléctricos Rivian Automotive, que recaudó más de US$ 12,000 millones en su debut en el mercado en noviembre, convirtiéndose en el mayor estreno en los parqués estadounidenses desde el de Alibaba Group Holding en el 2014.
Otras salidas a bolsa importantes fueron las de la empresa china de vídeo en línea Kuaishou Technology, con una recaudación de US$ 5,400 millones, y la del gigante coreano del comercio electrónico Coupang, que recaudó US$ 4,600 millones. “Ha sido un año extraordinario para la captación de capital en todo el mundo, y me atrevo a decir que es poco probable que se repita pronto”, indicó James Fleming, codirector mundial de mercados de capital de Citigroup.
Retroceso en las SPAC
Las SPAC, que salieron a bolsa en mayor número en Nueva York, recaudaron un total de unos US$ 160,000 millones este año, lo que supone el 28% de los ingresos totales obtenidos por las salidas a bolsa de Estados Unidos, según Refinitiv. Estas empresas de “cheque en blanco” han vivido subidas a una montaña rusa, ya que el entusiasmo de los inversores por ellas a principios de año se convirtió posteriormente en decepción por su escasa rentabilidad.
El principal fondo cotizado (o EFT, por sus siglas en inglés) de SPAC, el Defiance Next Gen SPAC Derived, ha perdido el 25% de su valor en lo que va de año, tras alcanzar su nivel máximo en febrero. “El ritmo máximo de actividad (de las SPAC) nunca fue sostenible y ahora el mercado se está consolidando. Pero las SPAC no van a desaparecer”, señaló Eddie Molloy, codirector de mercados de capital en las Américas de Morgan Stanley.
La lista de salidas a bolsa para el primer trimestre del 2022 es fuerte, con la plataforma de medios sociales Reddit, la ‘start-up’ de tecnología de transporte Via, el fabricante de ‘software’ Cohesity y la firma de capital privado TPG habiendo presentado a los reguladores la documentación necesaria para cotizar.
Sin embargo, los banqueros de inversión dicen que el reciente y tibio rendimiento financiero de muchas salidas a bolsa significa que es poco probable que la bonanza de este año se repita en el 2022, especialmente si los mercados de valores pierden algo de fuerza debido a la inflación y otras preocupaciones de carácter económico. También existe un riesgo regulatorio.
La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de Estados Unidos ha tomado medidas enérgicas contra la cotización de las empresas chinas en Nueva York, exigiendo más información.
El gigante del transporte por carretera Didi Global Inc , que completó su salida a bolsa por US$ 4,400 millones en Nueva York en junio, ha dicho que trasladará su cotización a Hong Kong, debido a las presiones de China a muchas de sus empresas para que trasladen sus acciones más cerca de casa. “Tengo que pensar que el 2022 será un año a la baja en los niveles globales de emisiones”, dijo Fleming.