Los exportadores brasileños de pollo podrían vender un volumen récord superior a los 4.7 millones de toneladas este año en los mercados mundiales, según una estimación realizada el lunes por la agencia de estadística y abastecimiento de alimentos del país, Conab.
Brasil alberga algunas de las mayores empresas cárnicas del mundo y los datos sugieren que la capacidad del país para competir y acceder a los mercados en un momento de mayor disponibilidad de oferta puede aliviar la presión inflacionaria de los alimentos a nivel mundial.
Si se confirma su previsión, las exportaciones de pollo habrán crecido un 6% a finales de año, según la Conab.
Asimismo, se espera que las exportaciones de carne de vacuno de Brasil aumenten un 15% en el año, a una cifra estimada de 2.84 millones de toneladas, mientras que las exportaciones de carne de cerdo caerán probablemente en torno a un 2%, hasta poco más de un millón de toneladas, al disminuir los envíos a China, dijo la Conab.
Se espera que los procesadores brasileños de pollo, vacuno y cerdo produzcan alrededor de 28 millones de toneladas de carne este año, manteniendo la disponibilidad per cápita de carne en el país por encima de los 90 kilos al año, dijo la Conab.
En el caso de la carne de ave, la producción se mantendrá cerca de los 15 millones de toneladas, lo que garantiza una disponibilidad per cápita de 48.6 kilos por habitante al año, menor que el récord del año pasado debido a la caída prevista de 3% en la oferta, la fuerte demanda de exportación y el crecimiento de la población brasileña, dijo la Conab.
En el caso de la carne de cerdo, la producción nacional sería un récord de 4.84 millones de toneladas en el 2022, un aumento de alrededor del 3% en comparación con el 2021, lo que podría ayudar a reducir los precios internos de ese tipo de carne.
La producción brasileña de carne vacuna, en cambio, tenderá a reducirse, reflejo de la floja demanda interna, según la Conab.
Aun así, el organismo dijo que las empresas locales podrán producir un estimado de 8.1 millones de toneladas de carne vacuna en el 2022, con la expectativa de que la disponibilidad per cápita sea de alrededor de 25 kilos por habitante al año.