Los analistas redujeron sus previsiones para los precios del oro para el resto de este año y el próximo, esperando que en el cuarto trimestre el metal precioso opere cerca de los niveles actuales antes de bajar en el 2022, mostró un sondeo de Reuters.
El oro muestra un buen desempeño cuando los inversores están ansiosos y cuando los rendimientos de otros activos, como los bonos, son bajos.
Los precios del lingote treparon a máximos históricos por encima de los US$ 2,000 la onza el año pasado ante el avance del coronavirus, pero cayeron con la recuperación del crecimiento económico y cuando los bancos centrales comenzaron a señalar alzas de las tasas de interés, que impulsarían los rendimientos de los bonos gubernamentales.
Un sondeo a 37 analistas y operadores este mes arrojó un promedio de US$ 1,795 la onza en el cuarto trimestre, en línea con los precios actuales y por encima de su promedio de US$ 1,770 en el tercer trimestre. La encuesta pronostica un precio promedio de US$ 1,750 la onza en el 2022.
Una consulta similar en julio predijo promedios de US$ 1,841 la onza en el cuarto trimestre y de US$ 1,785 en el 2022.
Los analistas que tienen una visión alcista para el lingote esperan una demanda fuerte de inversores minoristas, joyeros y bancos centrales. Dijeron que los precios podrían aumentar si el aumento de la inflación alimenta la demanda de oro como cobertura.
Pero es poco probable que el oro tenga un gran avance antes de que la Reserva Federal reduzca sus compras de activos y suba las tasas.
Para la plata, la encuesta pronostica precios promedio de US$ 24 la onza en el cuarto trimestre, en general en línea con los niveles actuales. La expectativa para el 2022 es de US$ 23.95.