El informe de empleos de Estados Unidos publicado el viernes apagó el optimismo naciente de que la economía estadounidense se estaba debilitando lo suficiente como para justificar un enfoque más lento por parte de la Reserva Federal en su batalla contra la inflación.
Las contrataciones superaron las estimaciones y el crecimiento de los salarios se aceleró más de lo previsto el mes pasado, superando las expectativas que se habían creado en Wall Street en las últimas semanas. Los futuros del S&P 500 caían, el dólar subía y los rendimientos del Tesoro repuntaban más alto aún.
En Wall Street, varios comentan sobre el inesperado dato de empleos.
Dan Suzuki, subdirector de inversiones de Richard Bernstein Advisors LLC, dijo que sería una lectura mala para los mercados. La cifra fue fuerte y hay presiones salariales claramente persistentes, pero los componentes internos y principales fueron bastante débiles. Eso sugiere que la Fed realmente no puede flexibilizar demasiado, pero el crecimiento sigue deteriorándose, comentó.
Para Victoria Greene, socia fundadora y directora de inversiones de G Squared Private Wealth, la adición de empleos fue un tanto impactante. “Fue una sorpresa porque ha habido muchos despidos anunciados en el sector de la tecnología y congelaciones de contratación. Esto, por supuesto, significa que la Fed puede permanecer completamente enfocada en la inflación”, dijo.
Por su parte, Jay Hatfield, director ejecutivo de Infrastructure Capital Advisors, comenta: “Definitivamente es un informe de empleos fuerte. Eso es más o menos lo que hubiera anticipado. Creemos, sin embargo, que la disminución de la oferta monetaria del 17% resulta en un dólar muy fuerte, tasas hipotecarias altas y precios de las materias primas en picada. Anticipamos que la inflación disminuirá rápidamente a pesar de la solidez del mercado laboral”.
Mike Bailey, director de investigación de FBB Capital Partners piensa que es justamente el informe equivocado en el momento equivocado. Indica que los inversionistas comenzaron a sentirse cómodos después de las declaraciones de Powell el miércoles de que había un camino favorable hacia el final del año.
Sin embargo, el fuerte número de empleos de hoy daña ese panorama. “Para ser justos, tengo la sensación de que los inversionistas y la Fed prestarán mucha más atención al próximo dato de inflación (IPC) que saldrá justo antes de la decisión de tasas de la Fed”, comentó.
Seema Shah, estratega jefe global de Principal Asset Management, dice que tener 263,000 puestos de trabajo agregados incluso después de que han elevado las tasas de política monetaria en unos 350 puntos básicos no es ninguna broma. Según Shah, el mercado laboral está muy caliente, acumulando presión sobre la Fed para que continúe elevando las tasas. Así, Shah cuestiona qué hay en este informe de empleos para convencerlos de que no lleven las tasas por encima del 5%.
Dennis DeBusschere, fundador de 22V Research, coincide en que es un dato muy fuerte y que va en contravía de todo lo demás que se ha visto en el lado laboral. Comenta que esto es malo para los activos de riesgo. No cree que esto cambie en absoluto las perspectivas de crecimiento económico. “Claramente se está desacelerando. El riesgo es que tengamos más caídas del S&P 500 y condiciones para garantizar que haya una desaceleración”, indicó.