Los inversionistas están abandonando la deuda en su intento por sortear los cambios bruscos del mercado provocados por la invasión rusa a Ucrania y la perspectiva de múltiples aumentos de tasas.
Los fondos de bonos de grado especulativo y de grado de inversión han sufrido nueve semanas consecutivas de salidas de capital considerables, por un total de US$ 12,800 millones y US$ 2,800 millones, respectivamente, según una nota de Bank of America Corp. que citaba datos de EPFR Global.
En Estados Unidos, los inversionistas sacaron US$ 5,400 millones de fondos corporativos de alto grado en el mayor éxodo semanal desde abril del 2020, según datos de Refinitiv Lipper para el período finalizado el 9 de marzo.
Los inversionistas se están retirando debido a que los bonos corporativos les están provocando las peores pérdidas en años en medio de períodos de volatilidad generalizada tras la actual invasión a Ucrania por parte de Rusia.
La inflación galopante impulsada por el aumento del precio del petróleo también está asustando a los mercados, mientras que los bancos centrales luchan por contener los precios, que se encuentran en sus niveles más altos en años.
El crédito se está “agrietando”, escribieron estrategas de Bank of America liderados por Michael Hartnet en una nota a los clientes.
Ha sido un año difícil e incluso los bonos corporativos en dólares más seguros están perdiendo más del 8%, mientras que la deuda equivalente denominada en euros ha caído más del 4.7%, según datos del índice de Bloomberg. En cambio, los inversionistas están recurriendo a refugios tradicionales como el oro, que tiende a recuperarse en momentos de tensión.
El crédito corporativo europeo también enfrenta otro golpe ya que el Banco Central Europeo, el mayor comprador, se prepara para una salida del mercado más rápida de lo esperado. La autoridad monetaria dijo el jueves que podría reducir las compras de bonos en el tercer trimestre, eliminando un pilar clave de apoyo para las empresas de la región.
Las medidas de riesgo del crédito corporativo han variado mucho en los últimos días. Un indicador de seguimiento de los swaps de default de deuda de empresas europeas de alto grado subió esta semana a su mayor nivel en casi dos años, mientras que el índice Markit iTraxx Crossover de swaps de default en empresas con calificación de grado especulativo superó esta semana los 400 puntos básicos por primera vez desde el 2020.