Las acciones de Estados Unidos han repuntado con fuerza tras el desplome de mediados de este mes. Para que la tendencia alcista continúe, el mercado estará atento a las señales de potenciales recortes de tasas en el discurso este viernes del presidente de la Reserva Federal Jerome Powell en el cónclave anual de Jackson Hole, Wyoming.
“Si los operadores oyen que se avecinan recortes, las acciones reaccionarán favorablemente”, dijo Eric Beiley, director ejecutivo de gestión de patrimonios de Steward Partners Global Advisory. “Si no oyen lo que quieren, desencadenaría una gran venta”.
Este es el reto para los gestores de dinero que volvieron a apostar en masa en las acciones de las grandes tecnológicas, y empujaron al S&P 500 cada vez más alto. Los mercados confían que la Fed comience a reducir los costos de endeudamiento en su próxima reunión de setiembre.
Pero Powell podría permanecer hermético sobre el calendario de recortes de tasas cuando hable el viernes. Y estaría muy en su carácter adoptar un enfoque cauteloso y sin compromisos a la hora de revelar cuánto pueden bajar las tasas cuando la Fed termine con su relajación.
“Los mercados confían tanto en que los recortes de tasas llegarán muy pronto”, dijo Beiley. “Sería una gran sorpresa que Powell no reforzara que ése es el camino a seguir”.
Esa “sorpresa” podría amenazar con echar por tierra con el rebote del S&P 500 tras el desplome de mediados de agosto por temores sobre el crecimiento mundial. Desde entonces, los bulls, o alcistas, han recuperado el control, y el índice de referencia de la renta variable acumula una racha ganadora de siete sesiones.
Pero algunos expertos en Wall Street advierten que es mejor no esperar mucha claridad del jefe de la Fed.
“Si nos fijamos en anteriores discursos de Jackson Hole, no es probable que recibamos un mensaje muy clarificador de Powell”, dijo Tom Hainlin, estratega nacional de inversiones de US Bank Wealth Management.
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Es probable que el presidente de la Fed insinúe que la política monetaria restrictiva ya no está justificada, según Bill Dudley, columnista de opinión de Bloomberg y antiguo jefe de la Fed de Nueva York. Pero no espera que Powell mencione la magnitud del primer recorte, sobre todo porque hay un informe de empleo el 6 de setiembre antes de su próxima decisión política el 18 de setiembre.
“Su tono es crucial”, dijo Stephanie Lang, directora de inversiones de Homrich Berg. “Si se muestra hawkish, las acciones reaccionarán negativamente”.
Para ser claros, los operadores esperan plenamente una reducción de tasas en la próxima reunión de la Fed. Pero no están seguros de cuán grande será. Y con pocos funcionarios programados para hablar en los próximos días, hay mucho en juego en las declaraciones de Powell.
Por este motivo, operadores de opciones esperan que el S&P 500 oscile más de un 1% en cualquier dirección el viernes, según Citigroup Inc.
Dicho esto, en Wall Street se cruzan los dedos para que lo peor del dolor de este verano haya pasado, con el S&P 500 a un 2% de su máximo histórico.
Los operadores ven un mercado tranquilo por delante. El interés abierto en opciones que apuestan por un descenso en el índice de volatilidad Cboe están en su nivel más alto desde junio de 2022 en relación con contratos que apuestan por alzas, según muestran los datos recopilados por Bloomberg.
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