El consumo de vino seco peruano creció un 5% desde el inicio de la cuarentena por la pandemia, pero a mediados de julio empezó a aumentar en 10%, influenciado por la mayor demanda de reuniones familiares como parrillas o almuerzos, comentó Alfredo Rotondo, gerente general adjunto de Bodega Viña Vieja.
“A inicios de la pandemia, las licorerías no realizaron una reposición de productos y se empezó a acabar el vino extranjero semi seco, ya que siempre ha sido el más demandado. En ese momento es cuando le dan una oportunidad al vino seco peruano de diferentes marcas”, explicó.
Según Rotondo, del total de la producción de vinos, el 70% es dedicado a la variedad semi seco; es decir, cerca de dos millones de botellas al año. El 30% restante se orienta al vino seco, una producción de 200,000 botellas al año. En estos números se refleja el nivel de consumo de vino seco en los últimos años.
“El vino seco ha tenido un realce y los productores en general hemos aprovechado esa oportunidad para afianzar nuestra producción. La realidad es que la producción de vino semi seco siempre ha sido el soporte para la producción de vino seco”, comentó.
Por otro lado, el crecimiento del vino peruano también se refleja en el mejoramiento de las bodegas. Se invierte el 15% de las ventas anuales en la viña, equipamiento de bodega y capital humano. Los productores peruanos han equipado mejor sus bodegas y ampliado el capital humano con profesionales calificados.
“En la producción de vino se necesita un enólogo, profesional calificado que conoce la calidad de vinos. Es alguien indispensable, al igual que un chef en un restaurante. Tenemos 300 hectáreas y planeamos expandir. Justamente en eso han ido invirtiendo los productores nacionales”, aclaró.
El lado comercial del vino seco peruano
El vino seco, según Rotondo, está dirigido a un segmento de NSE A y B, personas de mayores ingresos económicos que conocen las calidades de vinos.
Dentro de la producción de vino seco existen rangos de precios, está el varietal seco de S/ 28, luego el vino reserva de S/ 40 y finalmente el gran reserva de S/ 80.
“Hay que aclarar que no por el hecho de que compre vino de S/ 28 es de menor calidad, esto es porque un vino varietal se usa mayormente en almuerzos; es decir, un consumo diario. Los de mayor precio son para reuniones de corte más importante”, aclaró.
Estos precios, según Rotondo, siempre han tenido complicaciones frente a marcas extranjeras. Un vino chileno seco, por ejemplo, tiene un precio de S/ 20 en el mercado peruano.
“Chile y Argentina producen grandes volúmenes de vino, tienen un fuerte movimiento en sus países y el gobierno los ayuda. Aquí en Perú no sucede esto, los productores en general lo vemos por nuestra cuenta”, dijo.
En cuanto a la exportación, el vino peruano llega a Costa Rica, España, Estados Unidos y Brasil, siendo el 15% de la producción anual. El vino semi seco se envía para la colonia peruana de estos países y el vino seco para buscar nuevos consumidores.
El consumo general per cápita de vino en el país es de 2.8 litros al año, muy por debajo de los 15 litros al año que consumen los chilenos o argentinos. “Esperamos que con esta creciente demanda se pueda incrementar el consumo per cápita a por lo menos tres litros”, señaló.
Vino en lata
Finca Rotondo, Montesierpe, Viña Vieja y Pisco Vargas son las cuatro marcas de esta empresa. Bajo la marca Viña Vieja, la empresa lanzó una producción de vino en lata en plena pandemia, apostando hacia un nicho de mercado más joven que recién se está iniciando en el consumo de bebidas alcohólicas.
“Era un proyecto de hace cinco años y la pandemia nos llegó en pleno proceso, teníamos todo planeado, estudiamos el mercado y nos lanzamos. Queremos que ese público joven se interese por el vino, en lugar de optar por la cerveza”, explicó.
Rotondo refiere que el sabor del vino en lata no es diferente, pero si conlleva una cierta dosis de gasificación, propio de los productos enlatados.
“El envasado en lata es más barato que la botella, pero no es fácil. Para envasar un vino en lata hay que tener una línea de llenado diferente a la tradicional, en el país no hay quien haga ese servicio, también tuvimos que traer latas del extranjero y todo un proceso adicional”, precisó.
A pesar de esto, Rotondo refiere que el producto está teniendo buena aceptación en el mercado y aclaró que esto ya existe en otros países bajo otras marcas, pero Bodega Viña Vieja vendría a ser la primera en el Perú.
Por el momento, solo venden vino en lata en su variedad de semi seco, pero en los siguientes meses lanzarán su presentación en vino seco, apoyado bajo la demanda mencionada líneas arriba.