Un aumento de salario a gran escala para los altos puestos (jefaturas y gerencias) hacia el año 2023 no estaría en los planes de las compañías.
En dialogo con gestion.pe, el CEO de Mercer Perú, Gabriel Regalado, explicó que para medir el salario real de los trabajadores se debe considerar la inflación, el cual en Perú y países de la región viene registrando una alta tasa. En Lima Metropolitana la inflación fue de 8.45% en noviembre de este año, según cifras del INEI.
Así, dijo que cuando la inflación es controlada y se ubica en rangos de un dígito -entre 2% y 4%- los incrementos salariales pueden crecer por encima de ese nivel. Sin embargo, cuando la inflación está cerca o supera el doble dígito, usualmente los incrementos salariales no alcanzan ese mismo ratio.
“Los incrementos salariales no van a estar en doble dígito, los incrementos van a estar en un solo dígito, por lo que el salario real se va a ver disminuido”, detalló.
En ese sentido, indicó que considerando que los altos ejecutivos no tendrían un aumento importante en sus salarios, las empresas adoptarán algunas medidas para compensar esta situación, el cual pasa por revisar los esquemas de compensación y beneficios, a fin de observar elementos no necesariamente con altos costos muy elevados que puedan a ayudar a paliar la situación.
En este esquema destaca la Ley 28051, ley de prestaciones alimentarias en beneficio de los trabajadores sujetos al régimen de la actividad privada, a través del cual las empresas pueden otorgar vales de alimentos a sus trabajadores generando un menor costo presupuestario para ellos. “De este modo, la empresa no da un aumento salarial como tal, pero se da un implemento como beneficio laboral”, explicó.
De igual manera, figura el pago que realizan las empresas por los recursos al realizar el trabajo remoto, como el pago de la factura de Internet. A ello se suman los beneficios vinculados a la salud y bienestar.
Salarios mayores en perfiles especializados
Por su parte, Ricardo Fernández; director ejecutivo de Amrop, empresa reclutadora de talento a nivel gerencial y de directivos, precisó que las bandas salariales en el mercado ejecutivo no han tenido alguna reducción, pero tampoco se ha observado un incremento importante este año 2022 y no habría cambios para el año 2023.
Según dijo, se observa más que las empresas busquen cambios de los perfiles de sus ejecutivos, que una propia iniciativa de los ejecutivos de salir a buscar un empleo.
“No es que hoy en día los ejecutivos estén sacando la cabeza para salir de la empresa, esa no es la situación. La situación es que algunas empresas consideran que los perfiles que tenían antes de la pandemia no son necesariamente los que se necesitan hoy después de ella y hacen algunos cambios en los directivos, ya sea de su gerente general o gerentes de alto nivel”, explicó.
En ese sentido, dijo que en la búsqueda de ese perfil de nuevos directivos existen varias características, entre ellas, habilidades digitales, habilidades para el manejo de cambio y habilidades para el manejo de organizaciones híbridas, esquemas que empresas en Perú y el mundo las vienen adoptando.
Precisó que cuando las empresas encuentran los nuevos perfiles directivos ideales, no se ofrece un salario inferior del gerente o jefe previo.
“Al contrario, hay algunos puestos específicos que exigen alguna habilidad, como el perfil de un gerente en seguridad informática o de big data. Esos puestos sí están siendo demandados e, incluso, son mejor remunerados”, sostuvo.