Aunque el frenesí sin precedentes por el cambio de empleo durante la Gran Renuncia ha disminuido, muchos profesionales todavía están considerando la posibilidad de cambiar de carrera. He aquí cuatro preguntas críticas y menos obvias que debe hacerse antes de hacer la transición a un nuevo campo.
¿Qué motiva el cambio?
A veces, la respuesta es obvia: siempre le ha encantado la fotografía, ha perfeccionado sus habilidades hasta el punto de la excelencia y ahora es el momento de convertir su afición en su vocación. Pero otras veces, el deseo de cambiar de carrera puede surgir menos de la insatisfacción con su trayectoria actual y más de circunstancias particulares, como un mal jefe o una cultura corporativa que no le agrada.
Debido a que la reinvención profesional puede llevar mucho tiempo y ser disruptiva, es importante tener claro si realmente desea pasar a un nuevo campo o simplemente escapar de su situación actual (en cuyo caso, una reasignación interna o una nueva empresa podría funcionar tan bien como un cambio de carrera completo).
¿Cuál es la forma más sencilla de probar mis hipótesis?
A menudo asumimos que sabemos qué resolverá nuestros escrúpulos profesionales: por ejemplo, volver a estudiar para obtener un título avanzado o introducirnos en el mundo de la tecnología. Pero si bien sus instintos pueden ser correctos en términos generales, hay muchos detalles que no sabrá hasta que los pruebe.
Piense en formas sencillas en las que pueda probar las hipótesis ocultas que ha estado sosteniendo sobre la trayectoria profesional que desea. Esto podría incluir una combinación de entrevistas informativas, observación laboral, lectura de libros y memorias en el campo, y hacer preguntas puntuales a quienes están en el campo sobre los peores elementos de sus trabajos, para extraer evidencia que lo contradiga.
LEA TAMBIÉN: Elimine el aburrimiento y la frustración del recorrido de su cliente
¿Cuál es mi margen de maniobra?
Cambiar de carrera (porque se está moviendo en un campo en el que probablemente tenga menos experiencia) a menudo implica aceptar un recorte salarial o una degradación, al menos de forma temporal. Si tiene ahorros sustanciales o un socio que está dispuesto a apoyarlo, puede darse el lujo de dar mayores saltos profesionales, porque los recortes salariales a corto plazo importan mucho menos.
Por el contrario, si su margen de maniobra es menor, puede que tenga que contentarse con una serie de cambios secuenciales y menos dramáticos que le permitan mantenerse más cerca de su red y conjunto de habilidades existentes, que puede monetizar con sus tarifas actuales o cerca de ellas.
¿Cuál es mi plan alternativo?
El cambio de carrera implica inevitablemente algún riesgo. (Vale la pena señalar que mantenerse en el camino actual también influye, por lo que vale la pena tomar medidas de mitigación de cualquier manera). Es posible que le guste su nuevo campo, pero que no le guste la empresa en la que llegó por primera vez, o que haya subestimado cuánto tiempo le tomará a su startup volverse rentable. Realice una “autopsia” para pensar en los posibles obstáculos e identificar estrategias para superarlos.
A menudo dudamos en trazar planes alternativos porque no queremos “gafar” el nuevo proyecto o parecer que no estamos del todo decididos. Pero mantener una visión realista de los obstáculos potenciales es esencial para su éxito futuro y su capacidad de adaptarse si las condiciones sobre el terreno no son las previstas.
Cambiar de carrera puede ser una forma estimulante de mantenerse intelectualmente comprometido y compartir más de sus talentos con el mundo. Hacerse estas cuatro preguntas puede ayudarle a abordar algunos de los riesgos inherentes, y hacer que su transición sea más fluida a lo largo del camino.
Por Dorie Clark
LEA TAMBIÉN: Para trabajar bien con la IA generativa, es necesario aprender a hablar con ella
Comienza a destacar en el mundo empresarial recibiendo las noticias más exclusivas del día en tu bandeja Aquí. Si aún no tienes una cuenta, Regístrate gratis y sé parte de nuestra comunidad.