Solo el 22% de jóvenes no experimentó cambios en su trabajo. (Foto: Fundación Forge)
Solo el 22% de jóvenes no experimentó cambios en su trabajo. (Foto: Fundación Forge)

El 30% de jóvenes peruanos fueron desvinculados o despedidos debido al impacto de la pandemia del COVID-19, según la encuesta regional de la Fundación Forge.

El estudio reveló que, antes del 1 de marzo, el 61% los jóvenes entre 18 y 25 años tenían una relación de dependencia y el 21% tenía un empleo informal. Además, el 40% de estos jóvenes son el principal ingreso económico de sus hogares.

Al iniciar la pandemia y las diversas medidas de confinamiento que impactaron duramente en la economía peruana, la situación de estos jóvenes no lucía muy auspiciosa.

El coronavirus ha generado que el 30% de jóvenes peruanos pierdan el trabajo. Además, un 15% sufrió una reducción de su sueldo, y un 8% experimenta una jornada laboral reducida. Solo el 3% pudo encontrar un nuevo empleo.

Por otro lado, el 22% de jóvenes trabaja desde su hogar, y solo el 22% no experimentó cambio alguno en sus labores.

“Estamos viendo despidos masivos a nivel mundial como parte de la coyuntura. Las empresas tienen que reducir personal para tratar de disminuir los gastos, dejar de contratar proveedores, ahorrar caja y tomar medidas que les permitan sobrevivir, entre estas, los despidos”, señaló María José Gómez, directora de la Fundación Forge Perú.

A nivel regional, la encuesta arrojó que el 40% de los jóvenes que solo alcanzaron el nivel de educación secundario fueron despedidos. La tasa se agrava hasta 43% cuando se toma en cuenta a quienes tienen solo el nivel primario.

Esto se debe principalmente que este tipo de poblaciones no cuentan con los recursos necesarios para poder capacitarse, tienen que optar por aceptar trabajos que no necesariamente cumplen con contratos laborales dignos y los hace aún más vulnerables.