La Contraloría General alertó al Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) sobre los riesgos de accidentes eléctricos y la falta de mantenimiento de la infraestructura y bienes en el sistema de telecabinas de Kuélap, Amazonas.
De acuerdo al informe del periodo de evaluación (del 16 de agosto al 17 de setiembre del 2021), la comisión de control no evidenció que el supervisor del proyecto verifique que el concesionario cumpla normas eléctricas aplicables al sistema de telecabinas ni con el mantenimiento de los bienes de la Estación de Embarque, Andén de Salida y Andén de Llegada, de acuerdo al contrato de concesión.
“Se evidencia que el supervisor del proyecto no está cumpliendo a cabalidad con sus labores de supervisión de la ejecución de las obligaciones del concesionario establecidas en el contrato de concesión”, señaló la Contraloría.
Adicionalmente, mencionó que el mantenimiento de la vía de acceso al sistema se encuentra suspendido desde el 2018, a pesar de la retribución económica que percibe el concesionario.
“Estas situaciones van en detrimento de la seguridad de las personas que laboran en el lugar, de la salud y servicio que se brinda a los usuarios”, advirtió.
En ese sentido, la Contraloría General recomendó a las autoridades del Mincetur adoptar las acciones pertinentes, a fin de superar las situaciones y riesgos identificados por el control concurrente. Además, garantizar el logro de los objetivos del contrato de concesión en beneficio de los usuarios.
Al respecto, el Mincetur respondió que ha solicitado al concesionario y supervisor adoptar las medidas necesarias para revertir lo revelado por la Contraloría.
Sobre el equipamiento electromecánico
La comisión de control evidenció que al interior de la oficina administrativa del Andén de Llegada se encuentra instalado un transformador de 25 KVA (Kilovoltiamperios) con el riesgo de contacto para el personal que labora ahí y las personas que acuden a dicha área. En ese lugar, también se observó un gabinete electrónico con la puerta abierta y cables expuestos.
Agregó que en el cuarto de tableros de baja tensión, ubicado en la Estación de Embarque, se comprobó la presencia de cajas y elementos inflamables, así como objetos (escalera, reflector y cables) que impiden el acceso. Similar situación se observó en el Andén de Salida y junto al grupo electrógeno de emergencia, lo que genera riesgo de un siniestro.
También se identificó riesgos en el Andén de Salida debido a que dos transformadores de distribución de 800 KVA de capacidad, se encuentran muy cerca del grupo electrógeno de emergencia que emite gases inflamables. Del mismo modo, hay tableros sin esquemas eléctricos con información sobre su funcionamiento, lo que podría afectar las condiciones de mantenimiento o emergencia, entre otras situaciones.
Mencionó que todos estos hechos identificados incumplen el Reglamento de Seguridad y Salud en el Trabajo con Electricidad y el Código Nacional de Electricidad (utilización y suministro).
Actividades de Limpieza
De la revisión de las actas remitidas por el Mincetur, la Contraloría evidenció que el supervisor verifica de manera aleatoria, las labores de limpieza diaria por el concesionario en las zonas circundantes a la Estación de Embarque, Andenes y Accesos, así como de las instalaciones y equipamiento electromecánico, pero no con la periodicidad exigida en el contrato de concesión.
Tampoco se advirtió la adecuada supervisión de la limpieza de las unidades móviles o buses que transportan pasajeros, ni que haya verificado el lavado de pisos de andenes, espacios y dependencias con afluencia de público, actividades de desratización, o el aseo de las telecabinas de transporte de personas por lo menos dos veces por semana, tanto por el exterior como el interior.
Mantenimiento de bienes
La comisión de control alertó que no hay evidencia de que el supervisor haya verificado en su integridad las actividades de mantenimiento de bienes de la concesión (estructuras, arquitectura, instalaciones sanitarias y eléctricas de baja tensión, sistema de detección y alarma contra incendios, extintores, ascensor, entre otros) que el concesionario debió ejecutar de acuerdo al Plan de Mantenimiento de Bienes.
Tampoco se evidenció la supervisión al mantenimiento de la estructura de concreto armado de las estaciones, de andenes, pisos de cemento, porcelanato, cerámica, así como lo referido al mantenimiento de extintores y al sistema de cloración de agua, entre otros. En el caso de instalaciones eléctricas de baja tensión (iluminación) no se precisan las actividades específicas realizadas.
“Sobre las instalaciones electromecánicas del teleférico, el mencionado plan indicada 50 actividades que no han podido comprobarse ya que los informes de evaluación del supervisor no contienen el detalle de las actividades realizadas por el concesionario”, precisó.
Durante una visita de inspección realizada por la comisión de control, se identificó el deterioro del techo de Ichu y del triplay fenólico de la Estación de Embarque y de los Andenes de Salida y Llegada que también presentan deterioro por humedad.
Otras situaciones identificadas fueron la corrosión y deterioro de pintura en el recubrimiento metálico del piso del Andén de Llegada, así como barandas sin pernos de fijación en los Andenes de Llegada y Salida, deterioro del barniz de las columnas de la Estación de Embarque y del Andén de Salida.
A nivel de instalaciones sanitarias, se observó, en la Estación de Embarque, tapas de concreto de las cajas de registro rotas, además de no existir evidencia de la verificación de mantenimiento del sistema de cloración de agua y del tanque y pozo séptico.
Proyecto incrementó turistas
La Contraloría precisó que el mencionado proyecto es una Asociación Público Privada (APP), ejecutada bajo la modalidad de concesión, con una inversión referencial de US$ 21′113.965, cuyo contrato por el plazo de 20 años fue suscrito por el Mincetur como concedente en el 2014.
Comprende la Estación de Embarque (ubicado en el centro poblado de Tingo Nuevo), el Andén de Salida, el Andén de Llegada, una vía de acceso de 3 kilómetros entre la Estación de Embarque, el Andén de Salida, y el sistema de transporte por cable con 26 telecabinas con capacidad para ocho personas cada una. Las obras se iniciaron en agosto de 2015 y concluyeron en noviembre de 2016 iniciándose luego el periodo de operación.
El proyecto es importante porque contribuye a incrementar la actividad turística hacia el complejo arqueológico de Kuélap, que pasó de tener 56,000 visitantes en el 2016 a 103,000 un año después, con lo que se incrementó la llegada de turistas en 84%, según la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (Proinversión).