La economía mundial creció 6.1% en el 2021. (Foto: AFP | Kristalina Georgieva)
La economía mundial creció 6.1% en el 2021. (Foto: AFP | Kristalina Georgieva)

La directora gerente del , afirmó que el panorama de la economía mundial se ha “oscurecido significativamente” desde abril y que no puede descartar una posible recesión mundial el próximo año, dados los elevados riesgos.

Sostuvo que el FMI rebajaría en las próximas semanas su previsión de un crecimiento económico mundial de 3.6% para el 2022 por tercera vez este año, y añadió que los economistas de la entidad todavía están ultimando las nuevas cifras.

Se espera que el FMI publique su previsión actualizada para el 2022 y 2023 a finales de julio, después de recortar su previsión en casi un punto porcentual en abril.

La economía mundial creció 6.1% en el 2021.

“Las perspectivas desde nuestra última actualización en abril se han ensombrecido significativamente”, dijo la funcionaria, citando una propagación generalizada de la inflación, un alza sustancial de las tasas de interés, una desaceleración del crecimiento económico de China y la escalada de sanciones relacionadas con la guerra de Rusia en Ucrania.

“Estamos en aguas muy agitadas”, dijo. A la pregunta de si podía descartar una recesión mundial, sostuvo: “El riesgo ha aumentado, así que no podemos descartarlo”.

Los últimos datos económicos mostraron que algunas grandes economías, como las de China y Rusia, se habían contraído en el segundo trimestre, dijo, señalando que los riesgos eran aún mayores en el 2023.

“Va a ser un 2022 duro, pero quizá un 2023 aún más duro. Los riesgos de una recesión aumentaron para el 2023″, manifestó.

Los inversores están cada vez más preocupados por los riesgos de recesión, ya que una parte clave de la curva de rendimiento del Tesoro estadounidense se invertía por segundo día consecutivo el miércoles, en lo que ha sido un indicador fiable de que se avecina una recesión.

El presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, dijo el mes pasado que el banco central de Estados Unidos no estaba tratando de provocar una recesión, sino que estaba plenamente comprometido con el control de los precios, incluso si al hacerlo se corre ese riesgo.

Georgieva afirmó que un endurecimiento más largo de las condiciones financieras complicaría las perspectivas económicas mundiales, pero añadió que era crucial controlar el aumento de los precios.

El panorama mundial es más variado ahora que hace dos años, ya que los exportadores de energía, incluido Estados Unidos, están en mejor situación, mientras que los importadores tienen dificultades, señaló.

Un crecimiento económico más lento puede ser un “precio necesario a pagar” dada la urgente y apremiante necesidad de restaurar la estabilidad de los precios, remarcó.