El gasto de las familias se mantuvo en el lado positivo por cuarto mes consecutivo (si también se considera el resultado de diciembre 2023), aunque empezó a perder velocidad. El índice Big Data de Consumo del BBVA Research reveló una ligera desaceleración durante marzo de este año, marcando un crecimiento de 4.1% respecto a similar mes del 2023, por debajo del resultado de enero y febrero.
Este avance se da en un contexto de mejora de indicadores del mercado laboral, que consisten en mejoras de los ingresos laborales y sostenida creación de empleo, sobre todo en Lima Metropolitana. Estos factores fueron atenuados por el retroceso de la confianza del consumidor, por cómo se sienten los hogares respecto a su situación actual, tanto a corto como a largo plazo.
“Cabe aclarar, que el indicador es muy volátil, sobre todo porque las expectativas de las personas suele ser una variable muy cambiante”, explica Vanessa Belapatiño, economista Senior del BBVA Research.
“Los factores que sostienen el consumo en marzo, como el empleo, todavía se mantienen fuertes, previendo que la tendencia al alza se mantenga con alguna que otra eventualidad, principalmente por el lado de las expectativas”, detalla la economista.
Índice BBVA: El índice es elaborado sobre la base del gasto con tarjetas y retiros de efectivo, corregido por inflación.
1: Información diaria al 31 de marzo de 2024. Se utiliza información de los montos de compras con tarjetas de crédito y débito que realizan las familias y los retiros de dinero a través de cajeros y ventanilla. La corrección por inflación se realiza con el IPC de Lima Metropolitana.
Fuente: BBVA Research, informe marzo 2024
Gastos por sectores
Si se pone el foco en el gasto con tarjetas de crédito, el consumo de alimentos registró un incremento de 13.1%, sobre todo porque se mantiene el dinamismo en compras en supermercados, y se reduce la caída en el gasto en restaurantes.
El gasto en educación, por su lado, se desaceeró, alcanzando un 1.5% en marzo, mientras que en febrero llegó a 15.4%, explicado principalmente por el regreso a las clases escolares y universitarias (pues los pagos se realizan en los primeros meses del año).
En contraste, el sector de la salud continúa experimentando caídas, aunque en marzo fue más pronunciada, registrando un decrecimiento del 10.7% (en febrero fue de -2.6%). Además, el sector de transportes también experimentó un retroceso del 10.6% sobre todo por el gasto en taxis y pedidos de delivery (este rubro representa el 23% del gasto total para transporte).
En el sector de moda y belleza aún se mantiene en terreno negativo, pero cada vez se alcanza una menor caída: pasó de retroceder 10.1% en febrero a -4.6% en marzo.
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Subeditora de Economía. Licenciada en Economía (Esan), con estudios de maestría en Ciencia Política y Relaciones Internacionales (PUCP). Tengo siete años analizando la coyuntura y economía nacional.
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