Fletes de transporte marítimo continúan en descenso pero escasean contenedores para perecibles

Han pasado dos meses desde que empezaron a regularizarse los flujos de transporte de carga marítima a nivel global, y recién los exportadores e importadores nacionales empiezan a apreciar también menores fletes para sus embarques internacionales. El problema ahora para la industria de comercio exterior local, sin embargo, es la falta de contenedores refrigerados para envío de perecibles, según aseguraron a Gestión gremios como la Cámara de Comercio de Lima (CCL) y el Consejo de Usuarios del Sistema de Distribución Física de Mercancías (Conudfi), que agrupa a la Sociedad Nacional de Pesquería, Adex, Frío Aéreo, Enapu, entre otros grupos empresariales.

Alberto Ego Aguirre, presidente de la Comisión de Asuntos Marítimos de CCL, señaló que ya se observan reducciones en las tarifas de los fletes que comprenden contenedores secos, pero indicó que tales rebajas son aún menores para los casos de fletes para movilizar carga perecible.

Explicó que un flete del Callao a países de Europa, que antes se encontraba en US$11,000 por contenedor refrigerado de 40 pies (con capacidad para entre 20 a 22 toneladas), ahora está poco más de US$8,000, pero aún están más que el doble de lo que costaba antes de la pandemia (US$4,000).

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Faltan contenedores refrigerados

Sin embargo, agregó que hoy el principal problema es conseguir espacios en los buques, por la falta de contenedores refrigerados o para carga de congelados, situación que está afectando a los exportadores de productos perecibles, no solo agroindustriales, sino también a los del sector acuícola y pesquero.

Esa escasez se empieza a apreciar, explicó, a raíz de la recuperación de la economía global post pandemia, y considerando que las exportaciones peruanas compiten con las de Chile, Ecuador y Colombia, que usan la misma ruta marítima, y cuyas temporadas de producción agroindustrial y pesquera suelen coincidir.

Por su parte, Christian Calderón, director de Conudfi coincidió en que, en efecto, hay escasez de contenedores refrigerados para el Perú, y que el problema es que nuestro país tiene muy pocas importaciones de productos perecibles, sino mayormente de carga seca (que viene en contenedores no refrigerados), por lo cual resulta más costoso para una naviera tener que traer un contenedor refrigerado vacío sólo para atender a los exportadores.

Esa situación, observó Ego Aguirre, está ocasionando que, en algunos casos, los exportadores peruanos de perecibles, al no poder conseguir contenedores refrigerados, estén teniendo que dejar de cumplir contratos de exportación.

Soluciones ante la escasez

Frente a esta problemática, el dirigente de la CCL señaló que están analizándola con las líneas navieras que recalan en puertos peruanos, a fin de que sus naves faciliten la disponibilidad de mayor número de contenedores refrigerados.

Según Calderón, además de contenedores refrigerados, en el Perú se requiere implementar toda una cadena de frío desde las zonas de producción agroexportadoras hasta los puertos, que permita preservar las condiciones y calidad de los productos perecibles.

Para eso, remarcó, se requiere el apoyo de las autoridades regionales, que permitan ofrecer a los inversionistas privados, la disponibilidad de terrenos en zonas cercanas a las áreas de producción agrícola, para habilitar plataformas logísticas, con almacenes para productos refrigerados, entre otras facilidades.

Fletes aún menores desde China

En lo que respecta al precio de los fletes de transporte marítimo, Christian Calderón señaló que en el caso de las rutas del Callao a China han bajado incluso a niveles aún menores que los destinados a otros países como América Latina y Europa.

Detalló que hoy un flete del Callao a China se puede encontrar desde los US$3,000 por contenedor, mientras a Europa aún siguen cerca a los US$8,000, y que ello se debe a que China ha salido a vender con mayor fuerza al mundo, lo que ahora está beneficiando al intercambio comercial entre el Perú y los países asiáticos.

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Proyección

Ego Aguirre señaló que, en la medida de que se mantenga la normalización en los precios de los combustibles derivados del petróleo, y se siga recuperando el comercio exterior a nivel global, los fletes se seguirían normalizando, aunque aún esperan que se vean mejores tarifas del transporte marítimo para el Perú para mediados del 2023.