El BCP elevó recientemente sus proyecciones de crecimiento de la economía para 2018 y 2019 debido al buen desempeño en el segundo trimestre. (Foto: USI)
El BCP elevó recientemente sus proyecciones de crecimiento de la economía para 2018 y 2019 debido al buen desempeño en el segundo trimestre. (Foto: USI)

dejó hoy sin cambios la calificación de emisor Issuer Default Rating (IDR) en moneda extranjera a largo plazo del Perú en 'BBB+' con perspectiva estable.

Fitch explicó que la calificación de la economía peruana refleja sus sólidos balances públicos y externos y sus convincentes macropolíticas, que han afianzado una estabilidad macroeconómica y financiera.

Estas fortalezas equilibran las vulnerabilidades del país por su alta dependencia en materias primas, la dolarización financiera y una baja base de ingresos públicos, así como los menores ingresos per cápita e indicadores de gobernanza (incluida la efectividad del gobierno) que la mediana de sus pares con calificación 'BBB'.

“Se espera que el crecimiento económico aumente a 3.8% en el 2018 y promedie 4% en 2019-2020 en línea con la mediana actual de 'BBB', respaldada por la creciente inversión en minas de cobre e infraestructura pública, así como por el consumo”, resaltó Fitch.

Además, recalcó que Perú tiene un régimen de política monetaria creíble y las expectativas de inflación están bien ancladas dentro del rango meta del 2%+/-1pp del BCR, mientras que la volatilidad de la inflación está muy por debajo de la mediana actual de 'BBB'.

“Las tensiones políticas se han atenuado, la continuidad de la política macroeconómica y fiscal se ha mantenido y la confianza empresarial ha mejorado tras la transición al presidente después de la renuncia del ex presidente Kuczynski en marzo”, dijeron los analistas liderados por Kelli Bissett-Tom.

Los principales factores de riesgo que, de manera individual o colectiva, podrían desencadenar una acción de calificación positiva son:

  • ​Mayor crecimiento que reduzca la brecha de ingresos del país en relación con los soberanos de mayor calificación;
  • Fortalecimiento de la capacidad institucional que mejore la efectividad de la implementación de la política económica;
  • Mejoras significativas en los balances fiscales y externos y reducción significativa de la dolarización financiera.

Por el contrario, los principales factores que podrían conducir a una acción de calificación negativa son:

  • Debilitamiento de la inversión y el crecimiento que dificulte la convergencia de los niveles de ingresos hacia la mediana 'BBB';
  • Falta de consolidación de las finanzas públicas que dé como resultado un aumento más rápido de lo esperado en la carga de la deuda pública general;
  • Un shock externo negativo, como una fuerte caída en el precio de las principales exportaciones de materias primas del país, lo que resulta en un desempeño macroeconómico más débil y un deterioro en los balances fiscales y externos.