De acuerdo con la Comisión Multisectorial encargada del Estudio Nacional del Fenómeno “El Niño” (Enfen), las magnitudes más probables de ocurrencia del fenómeno de El Niño (FEN) son moderada (58%) y fuerte (25%).
“A pesar de que el FEN del 2017 fue uno de los más fuertes que hemos tenido -en impacto-, su magnitud fue moderada. Era una situación similar a la de ahora, recién se habían cambiado las autoridades, teníamos a funcionarios que estaban entrando a hacer gestión por primera vez”, recuerda Mary Mollo, profesora e investigadora de la Universidad ESAN y especialista en gestión de riesgos de desastres.
Sobre la exposición a movimientos en masa ante lluvias, “el resultado muestra un total de 16,104 centros poblados con probabilidad de riesgo muy alto, distribuidos a nivel nacional. Comprenden 1.2 millones de personas, 354,042 viviendas, 2.3 millones de hectáreas de superficie agrícola, así como 1,156 establecimientos de salud, 8,100 instituciones educativas, 33,906 kilómetros de infraestructura vial y 423 puentes. Entre los departamentos con mayor población se encuentran Piura, Áncash, Huánuco, Cajamarca y La Libertad”, indica el Plan Nacional ante la ocurrencia del Fenómeno El Niño 2023-2024.
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Las regiones con mayor riesgo por inundación ante lluvias asociadas al FEN son Piura y Ucayali. Finalmente, las regiones en riesgo muy alto por exposición a lluvias intensas y peligros asociados son Lima, Piura, La Libertad y Lambayeque.
Siendo este escenario conocido, ¿cómo avanza la ejecución de recursos para proyectos contra desastres naturales? La categoría presupuestal “Reducción de Vulnerabilidad y Atención de Emergencias por Desastres” es el principal mecanismo financiero de la Gestión del Riesgo de Desastres del Poder Ejecutivo. De acuerdo con el portal de Transparencia Económica del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) (al 03 de setiembre), las regiones han ejecutado el 26.5% de recursos para proyectos vinculados a dicha categoría, es decir, S/ 100 millones de S/ 378.4 millones.
En detalle, el avance de las regiones más expuestas es variado. En el caso de Piura, se ha ejecutado el 25.6% del presupuesto asignado en esta categoría. Una situación similar se presenta en Ica (22.9% de avance), Cusco (30.6%) y Tumbes (26.3%).
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Huánuco (76%) y Pasco (56.5%) son las que presentan mayor avance, mientras que Huancavelica (0.6%), Áncash (0.5%), Lambayeque (0.3%) y Lima (0%), son las más rezagadas.
Si se consulta el Fondo para Intervenciones ante la Ocurrencia de Desastres Naturales (FONDES), la situación no es muy distinta. Piura es la región con mayor presupuesto en este pliego, S/ 287 millones, de los cuales ha ejecutado el 26.6%. Le sigue Tumbes, con S/105 millones y un avance del 59.7%. La Libertad presenta un avance del 26.3%; Áncash, 6.7%; Lambayeque, 6.6%; Ica, 16%; Huancavelica, 0.8%.
Para Rafael Zacnich, gerente de estudios económicos de Comex, el problema detrás es la falta de capacidad de gestión de las nuevas autoridades subnacionales, sumado al hecho que se encuentran en su primer año de gestión. “Si se revisan los diez principales proyectos de Piura, la mitad tienen avance 0%. Estamos bastante mal”, señala.
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“Ahora en el 2023, el Gobierno ha asignado más de S/3,800 millones para la atención de la emergencia climática. Se están llevando a cabo intervenciones, pero aún hay muchos problemas por solucionar. Tenemos que estar preparados porque la magnitud de este FEN tiene la capacidad de afectar de manera más drástica que en el 2017″, agrega Mollo.
Los pendientes de la prevención del FEN giran en torno al probable déficit de recursos hídricos, cuya consecuencia es sequías en varias zonas del país. Además, las inundaciones se presentan como foco de enfermedades, como el dengue.
Bachiller en Economía y Negocios Internacionales de la Universidad ESAN y especialista en Sostenibilidad por la Pacífico Business School. Fue analista de Sectores y Empresas y del Content Lab de Semana Económica. Actualmente es redactora senior de economía en Gestión.