Toyota suspende envíos de 10 modelos por problemas de pruebas: ¿Qué camionetas son?

Un comité de investigación encontró irregularidades durante las pruebas de potencia que tomaron medidas basadas en módulos de computadora que ejecutaban software que en última instancia difería del software que se usó para la producción en masa, dijo el fabricante de automóviles japonés en un comunicado el lunes. Eso resultó en valores con menos variación, dijo.

El problema de la certificación es el último golpe que sufre Toyota, luego de un anuncio de su filial Daihatsu Motor Co. el mes pasado de que la mayoría de sus vehículos no fueron probados adecuadamente para determinar la seguridad en caso de colisión y que el fabricante de automóviles manipuló los resultados de las pruebas que se remontan a 1989. Como resultado, Daihatsu detendrá los envíos y suspenderá las operaciones al menos hasta febrero.

“Para avanzar como grupo es necesario tener un sistema de gestión que valore la voz de los trabajadores en el terreno”, dijo el director ejecutivo de Toyota, Koji Sato, admitiendo que la fabricación de datos es un problema en las filiales del fabricante de automóviles y que hay problemas de comunicación.

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Toyota detendrá inmediatamente la producción de los modelos afectados en Japón y dejará de fabricar los modelos afectados en el extranjero a partir del martes, dijo Sato, y la producción se reiniciará según cada país específico.

“A medida que la industria automotriz atraviesa un cambio que ocurre una vez cada 100 años, debemos pensar cómo abordar los nuevos desafíos y tecnologías”, dijo.

Tales casos de mala conducta “podrían dañar a Toyota Industries y, por extensión, al grupo Toyota en su conjunto”, dijo Tatsuo Yoshida, analista senior de Bloomberg Intelligence.

El comité involucrado en el problema de Toyota Industries encontró irregularidades durante las pruebas de potencia de salida para tres modelos de motor. Según la empresa, en total 10 modelos de automóviles utilizan estos motores en todo el mundo. Entre ellos se incluyen el Land Cruiser Prado, el Land Cruiser 300, el Fortuner y el Hilux.

Inicialmente, el comité había estado investigando a Toyota Industries por la certificación relacionada con los motores utilizados en montacargas. Los últimos hallazgos se produjeron después de que la investigación se ampliara a los motores de maquinaria de construcción y luego a los motores diésel para automóviles.

Las irregularidades ocurrieron “para evitar un retraso en la producción en masa”, dijo el lunes Hiroshi Inoue, presidente del Comité Especial de Investigación, en una sesión informativa separada, y agregó que “la responsabilidad recae en la alta dirección”.

El presidente de Toyota Industries, Koichi Ito, dijo que “no nos estábamos comunicando lo suficiente con Toyota Motor con respecto al proceso de prueba” después de que los pedidos aumentaron desde 2017. Dijo que buscará reconstruir las comunicaciones con la empresa matriz. Por el momento se desconoce el impacto del escándalo en las ganancias, añadió Ito.

El Ministerio de Transporte de Japón comenzará las inspecciones in situ el martes.

“En el futuro, estaremos involucrados en todas las actividades de toda la compañía para ayudar a reconstruir Toyota Industries y revisar la situación para garantizar exhaustivamente que la seguridad y la calidad sean las principales prioridades”, dijo Toyota en un comunicado.

Mientras los escándalos en Toyota se acumulan (el fabricante japonés de camiones Hino Motors Ltd., otra unidad de Toyota, dijo en agosto que descubrió que los datos de emisiones de sus vehículos estaban falsificados), Sato reflexionó que el problema común gira en torno a la comprensión y el respeto con respecto a la certificación.

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