S&P Global Ratings dijo que el impulso de las calificaciones se volvió “decididamente negativo” en agosto, con nuevas posibles rebajas superando las nuevas posibles mejoras en un ratio de 3 a 1.
La agencia ha colocado a 46 emisores en Outlook/CreditWatch Negative, la mayor cantidad desde julio del 2020, y estos emisores se concentraron en cinco sectores: productos de consumo; instituciones financieras; productos químicos, embalaje y servicios ambientales; atención médica en EE.UU.; y alta tecnología estadounidense.
En un reciente informe, titulado “Rebajas aumentarán a medida que la demanda comience a disminuir”, S&P examina el deterioro del crédito en emisores corporativos, financieros y soberanos.
“Específicamente, la categoría de calificación ‘B’ y la región de América Latina tienen una gran proporción de posibles rebajas en relación con sus respectivas proporciones de calificaciones”, anotó.
“El exceso de inventarios se citó como un factor en el 30% de las nuevas rebajas potenciales de Estados Unidos, en su mayoría emisores de productos de consumo, y la demanda se vio rápidamente presionada después de que algunos emisores acumularon inventario para evitar desabastecimientos en medio de problemas persistentes en la cadena de suministro. Este es otro desafío más para el crédito”, dijo Jon Palmer de S&P Global Ratings Credit Research & Insights.
S&P dijo esperar “un mayor deterioro en los próximos meses a medida que persisten la alta inflación, las cadenas de suministro tensas y las condiciones macroeconómicas desafiantes”.
“El impulso de la calificación se volvió decididamente negativo en agosto, con nuevas rebajas potenciales superando las nuevas mejoras potenciales 3 a 1″, dijo S&P Global Ratings el miércoles en su comunicado.