Qualcomm Inc. prevé ingresos para el tercer trimestre por encima de las expectativas del mercado, tras superar las estimaciones de ingresos para el segundo trimestre, en gran parte debido a su decisión de centrarse en el negocio de los dispositivos no móviles para amortiguar el impacto de la desaceleración de la demanda de teléfonos inteligentes.
Las medidas contra el COVID-19 de China, la guerra en Ucrania y el aumento de la inflación han hecho mella en los consumidores, impidiéndoles gastar en aparatos electrónicos como los teléfonos.
Sin embargo, Qualcomm se ha mantenido al margen del problema ya que el mercado de los teléfonos inteligentes de gama alta, donde es líder, no se ha visto tan afectado por la ralentización de la demanda como los dispositivos de menor precio.
Para reducir su dependencia de los teléfonos, Qualcomm ha diversificado sus fuentes de ingresos atendiendo a otros mercados.
El aumento de la adopción del 5G y de las aplicaciones basadas en la nube ha ayudado a Qualcomm, que fabrica chips que permiten a los dispositivos conectarse a las redes de datos móviles además de a las inalámbricas. La empresa también lanzó la última versión de su marca de chips insignia Snapdragon durante el segundo trimestre.
Los ingresos de los chips destinados a los aparatos con conexión a internet aumentaron un 61% durante el segundo trimestre, y los ingresos de su negocio principal de teléfonos móviles subieron un 56%, gracias al lanzamiento del nuevo Snapdragon.
Además, Qualcomm está sopesando el impacto de la lenta pérdida de negocio de Apple aprovechando el hueco dejado por Huawei en el mercado de los smartphones en China al satisfacer las necesidades de chips de marcas chinas como Oppo, Vivo y Xiaomi, especialmente para los teléfonos de gama alta.
La compañía prevé unos ingresos para el trimestre actual de entre US$ 10,500 y US$ 11,300 millones, frente a las estimaciones de los analistas de US$ 9,980 millones, según los datos de IBES de Refinitiv.
Los ingresos ajustados del trimestre finalizado el 27 de marzo fueron de US$ 11,160 millones, por encima de las estimaciones de US$ 10,600 millones.