Los coworking han crecido rápidamente en Lima. Según Binswanger Perú, el 2016 representaban el 1.3% del stock de las oficinas clase A y, al cierre del año pasado, alcanzaban el 7.5% de dicha categoría y el 1.6% de las de clase B. Sin embargo, la paralización del sector construcción ocasionado por la pandemia limitará su crecimiento. Además, atributos del formato, como los espacios comunes, hacen a esta propuesta un poco más vulnerable.