Aproximadamente 2,000 toneladas de pitahaya es lo que esperan captar en volumen los productores de este fruto en Huaral con proyección al 2025, año en el que esperan sacar adelante su primera exportación.
En Huaral existen cerca de 80 hectáreas en las que se siembra este producto. La producción se concentra en las zonas de Esperanza Baja, Esperanza Alta y el centro poblado Cabuyal, aunque las iniciativas para siembra también surgen en la sierra de la provincia huaralina debido a que la pitahaya es un fruto de fácil adaptación a diferentes climas.
“Hay interesados en la pitahaya, pero nuestra limitación, por ahora, son los volúmenes. En el 2024 nos prepararemos con la fruta, pero propiamente cantidades apuntamos a manejar a partir del 2025″, sostuvo Raúl Gigo, presidente de la Asociación de Productores de Pitahaya.
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El representante explicó que por cada hectárea la capacidad de producción es de alrededor de 20 toneladas por campaña. Sin embargo, la eficiencia se reduce hasta 15 toneladas como consecuencia del corte de plantines para su comercialización a los proyectos agroinmobiliarios que se desarrollan en regiones como Lambayeque y Arequipa.
Estos proyectos ofrecen —como inversión a los interesados— lotes de determinada extensión con una cantidad de plantines de pitahaya con el objetivo de, de una vez cosechado el producto, iniciar exportaciones en beneficio de los propietarios.
“Estimamos que hay 15 inmobiliarias en el país que están trabajando con este cultivo, con desarrollos de entre 100 o 400 hectáreas. Como cuentan con los volúmenes, en su caso es más fácil realizar la exportación”, expresó Gigo.
Actualmente, Huaral cuenta con la capacidad de proveer aproximadamente 800,000 plantines de la variedad American Beauty a las inmobiliarias a precios que oscilan entre los S/ 2 y S/ 2.50 por planta. Mientras, la pitahaya como fruta en el mercado local tiene precios mínimos de S/ 4 y máximos de S/ 12 el kilogramo.
“El costo de producción es bajo y el retorno es ventajoso para el productor, teniendo en cuenta que es un fruto que se maneja casi orgánicamente, pues no sufre casi de plagas y la aparición de hongos se puede tratar sin insecticidas. Tampoco demanda grandes cantidades de agua”, detalló el portavoz. Dijo que, sujeto al tratamiento de cada productor, la rentabilidad puede superar el 50%.
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Derivados
A través del aporte del Instituto de Educación Superior Tecnológico Huando, los productores de pitahaya en Huaral han encontrado la forma de explotar la fruta de calibres (tamaño) más pequeños, apuntando a la fabricación de licores como cervezas artesanales, yogurt, mermeladas o helados.
Gigo sostuvo que son seis agricultores los que han focalizado parte de su producción de la denominada ‘fruta del dragón’ a derivados.Corporación Abregu es uno de estos fundos.
“La proyección con los derivados es que no solo se vendan en Huaral y en los conos de la ciudad, sino también en supermercados de la capital”, señaló Walter Abregu, gerente general de esta empresa del norte chico.
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Bachiller de Comunicación Social de la Universidad Nacional del Santa. 10 años de experiencia. Trabaja en el Diario Gestión desde noviembre del 2021. Laboró anteriormente en la Sociedad Nacional de Industrias y el diario La Industria de Chimbote.
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