El Oleoducto Norperuano transporta crudo a través de la selva. (Foto: GEC)
El Oleoducto Norperuano transporta crudo a través de la selva. (Foto: GEC)

La empresa Petroperú hizo un llamado a las organizaciones indígenas que se han pronunciado públicamente en los últimos días sobre los incidentes en el Oleoducto Norperuano, así como a los defensores del ambiente y de la salud pública, para que intercedan ante los dirigentes de la comunidad de Mayuriaga y se permita la inmediata reparación del ducto.

Mediante un comunicado indicó que se está llevando a cabo una estrategia denominada “El Camino que Queremos”, con la cual se busca establecer una amistad sincera y duradera con las comunidades y poblaciones vecinas a sus operaciones.

En este marco, ha puesto en marcha el Plan de Desbroce y Sistema de Alerta Temprana para beneficiar a las comunidades colindantes con el ONP con trabajos de limpieza del derecho de vía y vigilancia mediante un sistema rotativo, con cuota de género, capacitación y apoyos a la formalización de empresas comunales y de las propias comunidades, entre otros beneficios.

En esa línea, la empresa expresó su voluntad de llevar paulatinamente los beneficios de este programa a todas las comunidades vecinas al ONP.

Sin embargo, dijo estar “sorprendida” por un pronunciamiento firmado por organizaciones indígenas en contra de recientes intervenciones de Petroperú para denunciar, como corresponde, la grave afectación ambiental que se está viviendo en el Oleoducto Ramal Norte (ORN) a causa de personas inescrupulosas que cortaron intencionalmente la tubería causando un derrame con graves consecuencias para todos.

Aclaró que sólo se han referido a quienes generaron el corte ocurrido en el kilómetro 193 del ORN el pasado 27 de noviembre y que hasta la fecha la comunidad de Mayuriaga impide reparar, a pesar de la permanente voluntad de diálogo de Petroperú, los diferentes sectores del Estado y la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM).

“En ningún momento Petroperú ha mencionado, y mucho menos responsabilizado, a pueblos indígenas ni a las comunidades nativas en general”, añadió.

Recordó que los autores de este corte tomaron la Estación Morona del Oleoducto, retuvieron a 20 trabajadores por más de tres días, firmaron un acta donde amenazaban con romper la tubería y días después cumplieron su amenaza debido a su disconformidad con los resultados de las recientes elecciones municipales en el distrito de Morona.

“Fueron los mismos dirigentes quienes asumieron la autoría del corte de la tubería. Existe un acta donde ellos amenazan explícitamente con la rotura de la tubería. Luego, la noticia del atentado contra el oleoducto fue comunicada a través de medios locales de Loreto”, detalló.

Petroperú reiteró que el caso de los dirigentes de Mayuriaga es un tema particular, ya que el corte fue generado por intereses completamente ajenos a la empresa y al Gobierno Nacional.

“Pero lo más grave es que desde el 27 de noviembre, hace ya 25 días, los dirigentes de esa comunidad impiden la reparación del ducto. Es decir, están provocando un serio daño ambiental y lo utilizan como instrumento de presión. Primero, exigiendo que se contrate personal local para la reparación y remediación ambiental, pretensión que vulnera abiertamente las prácticas de la empresa y, posteriormente, exigiendo indemnizaciones por los daños que ellos mismos han causado”, explicó.

Según información de Petroperú, de un total de 109 incidentes ocurridos desde el inicio de su operación en 1977, solo 11 (10%) han sido causados por razones técnicas. La gran mayoría fueron provocados por daños de terceros (63%) o por fenómenos naturales (27%), hechos que han sido comprobados oportunamente por las autoridades policiales y el Ministerio Público.

“Los cortes intencionales realizados al ONP representan un serio riesgo para la salud y el ambiente de las propias comunidades cercanas a esos incidentes; además de un considerable perjuicio económico para la región, la industria y el país en su conjunto. Es por ello prioritario defender y proteger al ONP”, mencionó.

Sin embargo, puntualizó no basta solo con condenar los atentados realizados contra las comunidades, el ambiente y el país. “Hay que sumar esfuerzos para defender el ONP y reparar cuanto antes la tubería”, puntualizó.