Unas once empresas pesqueras peruanas fueron golpeadas desde mediados del año pasado, luego que China, de manera unilateral, decidiera que estas empresas no podían ingresar sus productos hidrobiológicos a su país.
La pesca no tradicional, vinculada al consumo humano directo, es uno de los principales productos de exportación del Perú, enviando al exterior US$ 1,395 millones de enero a noviembre del 2021, aún por debajo de los niveles de prepandemia; y China es el principal país de destino.
Las razones expuestas por la autoridad aduanera de China (conocida con GAAC, por las siglas en inglés) es por una supuesta detección de COVID, en las envolturas de los alimentos, a pesar de que no existen informes científicos que indiquen que este hecho puede ocurrir.
Tras ello, las empresas respondieron casi de inmediato a la GAAC, presentando sus descargos, aunque la autoridad de China no ha respondido con la misma velocidad.
Según se conoció, se ha tenido que recurrir al apoyo del agregado comercial de la embajada de China en Perú para tener una respuesta de la GAAC.
Tres pesqueras con luz verde
Esta decisión ha involucrado al Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (Sanipes), quien informó a gestion.pe, que al menos tres empresas pesqueras ya iniciaron el envío de sus productos a China, tras actualizar y fortalecer protocolos de seguridad e inocuidad alimentaria.
En este trabajo aún está pendiente la respuesta de GAAC por las ocho empresas peruanas, que ya siguieron las recomendaciones de la autoridad aduanera de China.
“Como autoridad sanitaria peruana, hemos cumplido con todos los procesos que demanda el levantamiento de observaciones de la autoridad china, alcanzando los descargos necesarios a través de la Cancillería en China; por lo que, nos encontramos a la espera de que dicha autoridad finalice su revisión”, comenta Noe Balbin Inga, director de la Dirección de Supervisión y Fiscalización Pesquera y Acuícola de Sanipes.
Entiende que también las autoridades extranjeras deben cumplir con sus protocolos y plazos establecidos según su normativa; no obstante, indican que han solicitado se priorice el levantamiento de las suspensiones en todos los casos sin excepción, por haberse atendido a lo solicitado de forma técnica.
“A la fecha, se ha logrado levantar la suspensión a Esmeralda Corp SAC, Agrohidro E.I.R.L y Gamcorp S.A.”, informan.
De la misma forma, Sanipes ha pedido a la autoridad sanitaria de China que realice la visita a las plantas pesqueras peruanas como señal de transparencia y colaboración.
De otro lado, Arturo Aivar, director de la Dirección de Habilitaciones y Certificaciones de Sanipes, refirió que “se han realizado cinco capacitaciones respecto al cumplimiento de la normativa sanitaria y se ha gestionado la actualización al 100% de plantas procesadoras y almacenes conforme a los Decretos 248 y 249 de la GACC”.
Cabe indicar que los Decretos 248 y 249 de la GACC entraron en vigencia este año, siendo nuevas exigencias para el registro de los productos que ingresarían a China.
Aún falta respuesta
Cayetana Aljovín, presidenta de la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP), indicó a gestion.pe que, este es un tema que debe resolverse lo antes posible, considerando que tanto Sanipes y las empresas han atendido a los requerimientos de GACC, lo que evidencia el compromiso de las empresas afectadas y de la autoridad sanitaria peruana por garantizar la inocuidad de los productos pesqueros y acuícolas que se exportan, pero también voluntad política y un buen manejo diplomático y de comercio exterior.
“La Autoridad Aduanera de China (GAAC) ha dicho que por el momento no tiene tiempo de atender los casos de las plantas peruanas por el volumen de trabajo, ya que están haciendo lo mismo con las importaciones de otros países”, comenta.
Así, tras las gestiones ante la embajada de China en Perú dicho país ha cambiado el nivel de alerta, debido al avance de la vacunación contra el COVID.
Los productores han expuesto la necesidad de que la Cancillería y el Ministerio de Comercio Exterior (Mincetur) se involucren de manera más activa en este proceso, debido a las grandes pérdidas ocasionadas, ya no solo por la crisis económica, sino por una supuesta inacción política.
Consultamos con Cancillería sobre el hecho, pero hasta el cierre de la edición no se tuvo respuesta.