La pastelería San Antonio no deja atrás el giro que dio frente a la llegada del covid-19, la apuesta por el minimarket, que en su momento representó hasta el 100% de la facturación (hoy solo el 5%). Sin embargo, con la flexibilización de algunas restricciones, apuesta por continuar con su expansión.
“Al reinventar el negocio, nuestros procesos productivos cambiaron, antes se hacían en cada tienda. Para ser más eficientes y reducir los costos, hoy casi todo se centraliza en nuestra fábrica (ubicada en San Miguel, de 2,000 metros cuadrados)”, indica Rubén Sánchez, CEO de San Antonio.
Es por ello que sus planes de inversión apuntan a una nueva planta, esta vez de 7,500 metros cuadrados, para la cual destinarán entre S/ 20 millones y S/ 25 millones a inicios del próximo año.
“Esperamos que la ubicación sea entre el Mercado de Frutas y Santa Anita, en la carretera central. Ya estamos en conversaciones y buscando el terreno”, sostiene Sánchez.
Antes -refiere- la fábrica de San Miguel tenía una capacidad ociosa del 40%, actualmente es de 0%. “Este espacio estaba destinado a producir elementos básicos como pan congelado. Ahora se integra la pastelería y gran parte de la cocina. Las personas que trabajaban en tiendas pasaron a las fábricas”, anotó.
Indicó que a pesar de que la empresa ya inyectó S/ 2 millones para mejoras tecnológicas y aplicación de la planta en San Miguel, no resulta suficiente. Es por ello que al inaugurarse la próxima, esta pasará a ser un almacén.
Consumo
San Antonio ha ido reabriendo más locales en los últimos meses, como en el Centro Comercial El Polo y Las Casuarinas, y seguirá con otras. Asimismo, recuperó su tienda en La Molina, que fue cerrada por el costo de alquiler.
No obstante, Rubén Sánchez señala que, a nivel acumulado, la empresa aún no supera los niveles del 2019. “El primer y segundo trimestre del 2021 teníamos restricciones (40% de aforo y domingos de inmovilización). Pero si comparamos por meses, desde mayo el negocio incluso supera las ventas prepandemia”, dijo.
En cuanto al ticket de gasto promedio, en 2019 era de S/ 48 y ahora es de S/ 45. “Hay muchas ventas que son para llevar, esto se fortaleció y es más rentable para nosotros porque el delivery representa un costo”, indicó.
Entre tanto, el CEO de San Antonio comenta que el minimarket se mantiene, pero en espacio reducido. “Las mesas son más rentables, pero solo podemos operar al 60%. En el 40% que no se puede aprovechar, se mantienen las góndolas”, afirma.
CIFRAS Y DATOS
- Locales. San Antonio cuenta con ocho tiendas. Solo dos son alquiladas.
- Delivery. Representa el 8% de la facturación. Antes solo el 5%.
- Dólar. Ante el alza del dólar, la pastelería optó por no elevar aún los precios; compensan el impacto con platos de insumos menos costosos.
- Público. Antes era de 40 años a más, ahora es principalmente de 20 a 30 años.