Una nueva línea de producción impulsará el crecimiento de las ventas de Pamolsa, del grupo colombiano Carvajal Empaques, durante el 2024 y 2025, según adelantó su gerente comercial, Gustavo Bastarrachea Cáceres.
Esta nueva línea de productos PET (hechos de polietileno tereftalato) estará destinada principalmente al segmento food service, al cual actualmente abastece de vasos para bebidas calientes, tápers descartables, envases de aluminio, entre otros. Este segmento aporta hoy el 60% de los ingresos de la firma constituida en Perú, el sector industrial un 25% y los empaques para la agroindustria un 15%.
“Con esta línea de empaques que vamos a producir por primera vez, buscamos fortalecer la atención al mercado local y global, y proyectamos crecer (en ventas totales) progresivamente a dos dígitos los próximos dos años. Es una inversión fuerte porque se trata de una línea de negocio totalmente nueva”, comentó el gerente sin precisar el monto.
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Los trabajos para la instalación de esta nueva línea de producción se ejecutarían a partir de noviembre en su planta de rígidos del Callao, donde se elaboran todos los envases plásticos de Pamolsa. La empresa también tiene en la provincia constitucional una planta de productos secos y otra para el reciclaje de PET para producción propia.
Expansión en agroindustria
Por otro lado, Bastarrachea estimó que el consumo de empresas agroindustriales irá ganando participación en las ventas de Pamolsa: podría pasar del actual 15% a un 30% en los próximos años debido a los esfuerzos que está haciendo la empresa por llegar a nuevos clientes del sector en el Perú y el resto de países de América Latina (con excepción de Brasil). En mayo del presente año, la empresa reveló a Gestión que acababa de concretar “importantes acuerdos con agroexportadoras en México”.
“Tenemos todo un proyecto hacia afuera. La venta local a la agroindustria ha estado un poco complicada, así que estamos buscando la venta al exterior. En el sector de agro vamos a facturar al cierre de 2023 exactamente lo mismo que el año pasado, lo cual es impresionante teniendo en cuenta que la producción de arándanos, que es uno de los principales frutos de exportación, se ha contraído en 40%”, sostuvo el gerente comercial.
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En cuanto a las ventas totales de la compañía, indicó que al cierre de 2023 se mantendrán los mismos volúmenes que el año pasado, pero habrá una ligera contracción de los montos de facturación. Esto se debe a que los precios de venta se han reducido con respecto al 2022, al regularizarse los costos de los insumos y los fletes. El año pasado estas alzas habían sido trasladadas a los precios de venta, con lo cual la empresa logró mantener sus márgenes de rentabilidad.
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Redactora Senior con 10 años de experiencia en periodismo político, económico y de negocios. Actualmente forma parte del equipo de Negocios del diario Gestión.
