Si hay un segmento dentro de la industria de la moda que ha podido sortear de mejor manera los efectos de la crisis sanitaria es el deportivo. El homeoffice y la cada vez mayor preocupación por la salud (con la práctica de ejercicio) jugaron a favor de las diferentes marcas de indumentaria, zapatillas y accesorios en el mundo y en el mercado peruano.
Sin embargo, pese a arrancar bien el 2021, la exacerbación de la crisis sanitaria -que propició una segunda cuarentena en febrero- y la incertidumbre política de abril han afectado el consumo, revela Silvio Vila, gerente general de la marca deportiva New Athletic.
“En marzo logramos crecer 5% respecto a similar mes del 2019; pero en abril las ventas han retrocedido 30%, debido a la coyuntura electoral, y eso es señal de preocupación porque retrasa las inversiones. No hay una idea clara de quién nos va a gobernar, más aun teniendo como una de las opciones a un partido muy extremista” señala.
Indica que, tras esta situación, cerrarán lamentablemente el primer cuatrimestre en negativo en comparación al 2019. No obstante, confían en poder recuperarse en los siguientes meses.
De otro lado, señala, que la volatilidad del tipo de cambio perjudica y corta todos los sistemas y estrategias para poder hacer una venta eficaz y oportuna, y encarece los precios de las importaciones. “El precio del dólar es una variable muy importante a considerar para el negocio, así como para toda empresa importadora”, enfatiza.
Esta situación, sumada al incremento del precio del flete, ha encarecido los productos de la firma; sin embargo, señala que ha optado por absorber este sobrecosto pese a una menor rentabilidad, ya que ante una situación de pandemia subir los precios sería muy complicado, considera.
Expansión
En el país, New Athletic asegura haberse consolidado como la primera marca peruana deportiva y la quinta de mayor participación en el mercado local dentro de la categoría de calzado deportivo.
Destaca que, sin duda, su presencia a nivel nacional con tiendas propias y en el canal online los ha ayudado a destacar. No obstante, confiesa que ante la actual situación evaluarán un eventual cierre de tiendas, exclusivamente, de las menos eficientes.
Pese a ello, la marca no renuncia a su plan de internacionalización y espera poder reanudar en el corto plazo sus envíos a mercados de la región como Ecuador y Bolivia.
Vila recuerda que desde que se inició la pandemia del COVID-19 no ha podido volver a exportar a Ecuador, pero espera retomar sus envíos próximamente; así como concretar su ingreso a Bolivia.
Durante el 2020, la empresa logró abrir tres tiendas en medio de la pandemia, sumando un total de 15, pero este año las inversiones para desarrollo local están en estudio, aunque tienen muchas expectativas de seguir expandiéndose una vez las aguas estén más calmadas.